Sus manos le sudaban, y estaba seguro que su camisa de cuello hacía notar que el su sudor estaba presente ahí, se la paso limpiando y ordenando su casa para que el primer invitado que pise tenga una buena impresión, también mando a su madre lejos con tal de que lo dejara solo, le dio una lista larga de cosas para comprar y también le dio dinero extra para ella, así que nada debía salir mal.
Se dirigió a su dormitorio para darse una ducha rápida, y salió con una toalla de Kumamon enrollada en su cintura dejando notar su pancita sin nada de músculos, pero si era tierna.Aunque el la odiara.
El timbre sonó un par de veces sintiendo los nervios salir a flote nuevamente, como pudo sacó su ropa del armario corriendo a la planta baja poniendo casa prende en el transcurso, hasta quedar bien vestido, o lo que para él lo era, se paro frente a la puerta tomando todo el aire que pudiese, detrás de esa puerta estaba la solución de su problema, o más bien sus problemas.
Tomo la perilla con sus manos temblorosas y la abrió dejando ver a un chico de cabello naranja. Las palabras se escondieron en lo más profundo de su ser en cuanto bajo su mirada para ver el cuerpo del contrario.
¿Era normal que alguien con un rostro tierno vista de forma tan ruda?
Ya saben, pantalón roto, botas de Emo, una playera holgada, lentes de sol, y su cabello sigue igual de rebelde, si su madre lo viera con ese peinado seguro lo mandaría a un psicólogo, digamos que a pesar de que la madre de Yoongi sea muy liberal al aceptar su sexualidad, es algo estricta en algunas cosas.
—¿Y bien?— cerró su bocota y miro a los...lentes del otro.—¿No me invitaras a pasar?— dijo haciendo una mueca.
—Oh, si, claro, pasa...—
Jimin sonrió y pasó al interior de la casa quitandose sus lentes negros para mirar con más a detalles los alrededores, notando a primera vista una fotografía donde estaban Yoongi y lo que posiblemente era su madre.
—¿Gustas pasar arriba? Ahí esta mi habitación.— sonrió con un leve sonrojo en sus mejillas.
El pelinaranja asintió y ambos subieron a las escaleras llegando al cuarto que correspondía, Yoongi fue el último en entrar así que cerró la puerta con seguro, no quería que su madre llegara antes y lo viera con alguien, posiblemente se vuelva loca de que por fin tiene un yerno.
Cuando se dió la vuelta Jimin estaba sentado en la cama mirando todavía al rededor, no sabía cual era el problema o del porque seguía mirando sus paredes, hasta que se dio cuenta que esta tapizado con imagenes de su personaje preferido.
—Con que...¿Kumamon?— soltó una risa Jimin antes de comenzar a carcajear. —Oh mierda...en verdad eres un ñoño.—
Yoongi bajó la mirada cerrando sus ojos con fuerza he inflando sus mejillas a la vez que apretaba sus puños, realmente no tenía problema en que supiera que le gustaba ese personaje, no tenía nada de malo, pero era hora de hacer su segunda pase.
—Me llamo Min Yoongi, tengo dieciocho años, estudio el último año de preparatoria, soy el lider del consejo estudiantil, tengo tres premios sobre el concurso internacional de Física, me gusta Kukamon, amo las mandarinas y...—
—Callate, no debes decir todo eso, es innecesario.— interrumpió Jimin mostrando seriedad.
Yoongi abrió los ojos lentamente haciendo una pequeña reverencia en forma de disculpa.
—Comencemos entonces, por lo poco que se, es que quieres cambiar ¿Cierto?— El contrario asintió.—Agregando tambien que quieres ser un experto en la cama— otra vez asintió.
—¿Crees que tenga alguna esperanza?—
Los ojos de Yoongi brillaron de emoción.—Emm...no, pero veremos que puedo hacer por ti.— Jimin se levantó de la cama acercandose al de ojos gatunos.
Caminó de forma lenta alrededor de él, notando cada estructura de su ser de pies a cabeza, incomodando a Yoongi, o más bien, lo estaba poniendo nervioso.
No supo como sucedió, pues Jimin lo tomó de los hombros y lo empujo hasta la pared acorrandolo entre sus brazos que estaban a sus lados de la cabeza.Ambos se miraron fijamente, mientras que Jimin mantenía su expresión sería, Yoongi respiraba de forma agitada, y su rostro estaba completamente rojo, provocando que el pelinaranja riera tomando su mentón para acercarse a su rostro rozando levemente esos finos labios rosados.
—¿Algunas vez has besado a un chico?—Susurró con una voz grave, el cuerpo de Yoongi sintió pequeños escalofríos.
—N-no...— tragó un poco de saliva.
—¿No quieres saber como se siente?—Sintió que la azucar se le bajaba con aquella pregunta.
Entró en pánico cuando ahora los carnosos labios de Jimin estaban acercandose a los suyos, estaba por darle un beso, un maldito beso, su primera vez, estaba esperando por esto mucho tiempo.
Pero creía que era demasiado pronto.
—¡Basta!— gritó empujandolo lejos de él, se dejo caer al suelo tocando su pecho sintiendo como era que su corazón latía varias veces.
—¿Que te sucede? Pensé que querías cambiar, idiota.— gruñó Jimin acomodando su cabello varias veces. —Bueno, la actitud la tienes, solo falta que aprendas a recibirla en la cama.—
Yoongi abrió mas de lo normal sus ojos.
—¿A que te refieres...?— preguntó viendolo asustado.
—Imbecil, me refiero a que si con un beso te pones así, no quiero imaginar como estarás cuando te amarren y te la metan.— volteo a ver al pelinegro, e hizo una mueca notando que su rostro estaba palido.—¿Que? No duele tanto como te lo pintan.—
—Yo...Amm, creo que me entendiste mal...— susurró jugando con sus dedos varias veces dedicándole una sonrisa penosa.
—¿Como?—
—Yo quiero ser el activo.—
Los hombros de Jimin cayeron, llevó una de sus manos a la frente y por último también se dejó caer a la cama.
—Tenemos un grande problema...—
Yellow2Min
🍥02/06/2021✨
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Pequeño grande problema (YOONMIN)
FanfictionDonde Yoongi solo es un simple Nerd Virgen con 18 años que se masturba todas las noches viendo Porno Gay, Su sueño es Ser un Dominante en la cama, aunque tiene miedo de cagarla. Hasta que un día se topa con Park Jimin, un maestro del BDSM , que esta...