II

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A la mañana siguiente , Mark no se sentía con ganas de salir de su habitación , por más que su abuela lo hubiera llamado y hablando con él a través de la puerta , nada lo podía sacar de allí.

Sentado en su cama , con las últimas lágrimas observo el techado gris , quedándose perdido durante unos minutos , hasta ser llamado nuevamente por la anciana.

—Cariño , por favor sal necesito decirte algo importante... por favor hijo-pudo oírse una tos seca luego de esas últimas palabras , que hizo que Mark se preocupara y saliera rápidamente de la habitación.

—Abuela¿Te encuentras bien?

—Si, estoy bien... necesito decirte algo importante ven.

Se dirigieron hacia la sala donde la mujer se sentó con dificultad , siendo ayudada por Mark quien después se sentó frente a ella.

—Estos días no me he encontrado muy bien y no quiero preocuparte... el señor Jung me acompañará.

—¿A donde irás?-preguntó el joven.

—Necesito ir hasta la gran ciudad .

—¡¿Estas loca!? Abuela , la ciudad queda muy lejos de aquí , y para una mujer como tú en ese estado no es seguro que vayas.

—Es por eso que me acompañara el señor Jung , saldremos mañana por la madrugada.

El descontento se dibujo en el rostro de Mark , que la anciana pudo ver claramente.

—No te preocupes cari-fue interrumpida por una fuerte tos , diferente a la anterior, la mujer trató de tapar su boca con un pañuelo y de el salió un poco de sangre.

—¡Abuela!—socorrio Mark a la anciana—¡Claramente no te encuentras bien!

Mark trató de calmar la tos de la anciana llevándola a su habitación para que pudiera descansar.

La preocupación y angustia envolvieron a Mark durante toda la noche, teniendo que levantarse toda la noche porque la tos de la mujer empeoraba al igual que la sangre.

Durante la mañana, Mark ayudó a su abuela a levantarse y preparar sus pertenencias para irse

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Durante la mañana, Mark ayudó a su abuela a levantarse y preparar sus pertenencias para irse.

—¿Tienes todo verdad?—cuestiono el joven quien miraba atentamente a la mujer, que solo asintió.

Mark abrazo a la anciana , conteniendo las lágrimas—No tardes mucho por favor... no quiero estar solo otra vez.

—Oh , mi pequeño niño, estaré bien no te preocupes por mi y una cosa más no estés preocupado Mark eres muy joven para pasar por estas cosas y comprendo tu tristeza por tu madre.Pero créeme ella estaría feliz de que tu sonrieras—dijo la mujer tratando de consolar al joven.

Para el mediodía , su abuela ya se había ido , Mark cocinaria esta vez , y luego de un par de intentos terminaría cocinando una sopa de verduras de la propia cosecha que había plantado junto a su abuela.

Comia despacio , mientras intentaba encontrar señal en la vieja radio , tal vez podría conectarlo a alguna señal de la ciudad , pero fue en vano solo interferencias podría escucharse.

Mark intentó un par de veces más sin resultado , cansado decidió descansar un poco frente a la chimenea , tomando la manta se envolvió y poco a poco empezó a caer en el sueño profundo.

La radio empezó a emitir un extraño ruido de interferencia más molesto y de el salió una voz que parecía ser de alguien queriendo comunicarse , pero no podían entenderse las palabras , hasta que a poco el mensaje de la persona iba entendiéndose mejor

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La radio empezó a emitir un extraño ruido de interferencia más molesto y de el salió una voz que parecía ser de alguien queriendo comunicarse , pero no podían entenderse las palabras , hasta que a poco el mensaje de la persona iba entendiéndose mejor.

"Sigo aquí , no hay nadie conmigo...sigo aquí... en este mundo solitario, necesito a alguien conmigo...pero no cualquier persona... alguien que me entienda...
un amigo...



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