ʀᴇᴄʜᴀᴢᴀᴅᴀ [ᴘᴀᴜʟ ʟᴀʜᴏᴛᴇ]

Me Voy

Los Vulturi llegaron, Alec me sonrió y yo a el, no soportamos mas y nos abrazamos, mientras que Jane arreglaba lo demás.

—El amo quiere que lleves a tu hermano, al parecer sabe que ha crecido.
—Lo llevare, pero antes debo ir por unos cuantos integrantes mas. – El asintió.
—¿Cómo vas con tu luna? – pregunto con cierta tristeza.
—Bueno, pues me voy a casar con el, de hecho estoy comprometida. – Le enseñe el anillo, sonrió pero en sus ojos había una tristeza reflejada.
—Me alegro por ti, bueno dado a que no podremos estar juntos te lo diré. – me miro y con su mano tomo mi mejilla y con la otra mi mano, miraba a Alec a sus ojos rojos. – Te amo, desde que tienes 5 años, desde el día que te ayude.
—Me halagan tus palabras. – El me dio un beso en la mejilla. – Pero ya amo a alguien mas.
—Estaré dispuesto a esperarte por un millón de siglos. – me dijo y se alejo un poco, me sonrió. – Espero estar invitado a la boda.
—Claro que lo estarás. – Ahora fui yo la que fue corriendo a el y lo abrazo. – Te quiero. – Me acerque a su mejilla y le di un beso.
—Yo también, pero recuerda te estaré esperando. – En un abrir y cerrar de ojos Alec ya no estaba.
—También te esperare. – susurre y me acerque donde estaban los demás. – Veo que Jane no le dio una segunda oportunidad.

Hable viendo a la pobre chica en llamas.

—¿Qué harás ahora? – Me pregunto Rosalie.
—Bueno debo ir a Canadá, pero tengo algo que hacer primero. – Mire a mi manada. – Nos vemos de rato, vamos.

Corríamos a dirección de la casa de Sam, llegamos y Logan fue por Leah y yo por mi hermoso Lobo el cual me dio un beso.

—Te extrañe. – dijo en susurro.
—Lobo, no paso mucho tiempo. – dije entre risas.
—Hueles a el. – Me empezó a lamber el cuello, pero me daba cosquillas.
—Antes no eras así de posesivo. – Me burle.
—¿No te gusta? – Me dijo con una sonrisa seductora.
—No. – Su sonrisa se quito. – Me encanta. – Y volvió a sonreír.
—¿Cuándo te vas?
—Hoy por la noche. – Se alejo y me vio triste. – Si me voy después tardare mas en regresar.
—Esta bien. – Me dio un beso en la frente. – pero antes debes ir con Charlie.
—Bien, pero debes hablar de nuestro compromiso.
—Lo hare. – Miro a Sam. – Iré a la casa del suegro a pedir la mano.
—¡Suerte! – Le gritaron todos. - ¡Cuidado con los balazos!

Paul y yo reímos.

—Vuelvo en un momento y nos vamos. – Los chicos asintieron.

[...]

Llegamos a casa y temblaba, no hablaba desde lo ocurrido cuando Bella se fue.

—Todo estará bien, yo estoy contigo. – Me dijo Paul en el oído y toco la puerta.

Papá abrió y al verme ahí con Paul, se hizo de lado para que pasáramos.

—Que alegría tenerlos. – dijo. - ¿Quieren agua, jugo?
—Yo no gracias, - Mire a Paul. - ¿Tu quieres algo?
—No, estoy bien. – Me sonrió y me puse roja.
—Bueno yo iré a prepararme un café.

Papá se fue y yo seguía temblando, Paul puso su mano en mis piernas y me fui calmando, Charlie regreso al ver la mano de Paul levanto la ceja, pues el pensaba que salía con Peter, quería leer su mente pero sabia que eso no estaba bien.

—Ahora si. – Dijo para ver si Paul quitaba su mano pero no lo hizo.
—Papá, quiero pedirte perdón. – Solté. – Se que me comporte muy infantil, pero era como realmente me sentía y no me arrepiento de lo dicho porque se que fue verdad, solo quiero tu perdón y que aceptes mi compromiso con Paul.
—¿Te vas a casar? – dijo ignorando mis otras palabras. – Eres muy joven, ¿En que piensas Paul? – se quedo callado unos momentos. – No lo acepto y tu desde hoy vuelves a vivir aquí no volverás a la reserva con esos chicos ni con Paul, es mas te iras a California o Canadá.