L: my story

My story

Yo soy la justicia, digo constantemente. Pero ¿qué es la justicia? ¿la justicia siempre gana o el que gana se convierte en la justicia? En realidad sólo me involucro en casos de mi interés personal. Esto no es justicia. Resuelvo casos difíciles porque es mi pasatiempo. Bajo los principios de las leyes modernas, yo también soy un "villano" que ha cometido muchos crímenes. Sin embargo, no me detendré hasta resolverlos... Ya que detesto perder.

El hecho de llegar a los ocho años a un orfanato para niños superdotados, con mi luego ayudante y mayordomo Watari, hizo que toda mi vida, desde esa edad, haya girado alrededor de mi inteligencia superior a la media.

Siendo pequeño ya que me consultan sobre problemas, acertijos, e incluso casos de la policía internacional, que nadie más ha sido capaz de resolver. Así me convertí en el mejor detective del mundo... y de hecho, los otros dos detectives más famosos, Eraldo Coil y Deneuve, ¡también soy yo! Te doy una fresa si guardas el secreto.

De todos modos, no importa cuán capacitado que estés, tú solo no puedes cambiar el mundo. Pero eso es lo maravilloso del mundo. ¡Y es que a veces las preguntas son tan complicadas y las respuestas tan simples! 

Es verdad que tengo manías y costumbres extrañas. Y no sé relacionarme normalmente con las demás personas. Los manipulo, los uso para comprobar mis teorías... y miento. Soy muy mentiroso. Nada de lo que digo tiene sentido, y nadie sabe realmente cuán en serio estoy hablando. Si fuera tú, no creería mucho de ello. Supongo que es mi método de defensa, parecer impenetrable, frío, distante. Y la verdad es que anhelo el afecto y el contacto humano como cualquiera. Soy una persona muy simple.

Un idiota, con sus traumas, su historia, sus miedos. Miedo a que se burlen de su infancia, sus sueños, de sus ideas, miedo a que le mientan.
Soy el tipo de idiota con todos esos deseos y temores. Y estoy orgulloso de ser un idiota.

Puedo ser arrogante también. Creo en el "ojo por ojo". Soy terco e infantil. Introvertido. No tengo tacto al comunicarme. Puedo ser excéntrico, un genio incomprendido que se aburre y deprime con facilidad cuando las cosas no salen como quiere.

Esta es mi historia, este soy yo.