Siempre que mi corazón arde
Acudo a ti
Cual pez anhela el agua
Cual desierto al oasis
Cual calor al fuego.
Siempre mis caminos vuelven a ti
Siempre los hilos se unen en ti
Siempre las lágrimas lloran en ti
Todo se reduce a ti
En un lugar donde no hay calor ni luz.
Eres el farol que aun con esfuerzo se mantiene vivo.
Eres el consuelo de una vida de lamentos.
No se a quien más acudir
No hay quien escuche mi voz.
No hay quien aprecie lo que soy.
No hay quien sienta lo que siento mejor tu.
Quisiera poder hablar contigo
Quisiera poder escucharte
Quisiera poder sentirte.
Entre tanta calidez solo puedo percibir frialdad y vacío.
Quisiera poder sentirte entre las caricias de mi alma.
Quisiera sentir tus brazos en mi.
Si tan solo...
Si tan solo no fueras un simple pedazo de papel.
