La Hermana de James Rodríguez •Cristiano Ronaldo•

Ibiza/Sorpresas y algo más

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Antes de empezar, vean la fotografía de multimedia, podrán imaginarse de como es el lugar y las situaciones en las que están los protagonistas.

Quiero recomendarles la novela de mi buena amiga paulinhajgl titulada "Amor por coincidencia" de uno de mis amores Neymar. Está muy buena.

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NARRA ______

Todo esto era una completa locura. Ahora mismo siento que mi corazón se saldría de mi pecho en cualquier momento.

Si, James, no se había enterado de que estoy en Ibiza. Sólo Daniela. De seguro me regañará.

Simplemente aquí estoy junto a él, sólo acepte sin pensarlo dos veces. Aún no podía creerlo y no sé la razones por la cual acepte.

Estaba concentrada viendo el mar, estando de pie.

Sentí su mano en mi parte baja de la espalda.

-¿está todo en orden?.- dijo Cristiano, apartando su vista del señor bastante adulto, sonreí

-Si, esta todo bien.- dijo

-Señor, está llegando.- dijo y apareció un yate muy elegante.

Cristiano asintió y le regaló una mirada agradable al tipo.

-Entra, te encantará.- me dijo sonriendo, llevándome de la mano.

-Oh Dios esta muy hermoso.- dije sin decir más palabras observando el yate por dentro.

Era precioso.

-Espera ¿no estaremos en un hotel?.- dije

-Aquí es mucho mejor ¿te gusta?.- dijo sonriendo.

-¿qué si me gusta? ¿Hablas enserio? Me encanta.- dije -No quiero imaginar cuanto te habrá costado todo esto.- dije.

El me sorprendió por detrás y susurró a mi oído.

-Eso es lo de menos, todo es especialmente para ti.- dijo y no supe que decir.

-Es hermoso todo lo que haces, pero... ¿Por qué todo esto?.- dije

-Lo sabrás muy pronto.- dijo haciendo aquella voz misteriosa de nuevo.

Negué con la cabeza sonriendo. La verdad esque tenía mucha curiosidad.

A la vez estaba muy nerviosa estando aquí con él a solas. A solas.

Habían tres habitaciones, en una estaban todas mis pertenencias. En otra estaban las de Cristiano.

Cristiano terminó de conversar con aquel tipo muy elegante y se marchó.

Al parecer estábamos los dos solos.

Me dirigí a la proa del yate. Traía unos shorts jeans y un blusón debajo de él mi bañador de dos piezas, turquesa con blanco.

Me quité lo que traía, Cristiano no se había percatado que me encontraba allí.

Salté y me sumergí en aquellas aguas azuladas.

Pude sentir como el agua me abrazaba.

Lo vi corriendo, preocupado.

Quizás no haría daño una pequeña broma, bueno ya es la segunda vez que lo hago, sino me equivoco, rei internamente.

Comencé a fingir que me ahogaba.
Pronunciaba su nombre entrecortada mi voz. Lo hacía muy bien que lo vi quitarse rápidamente la camisa. Y se lanzó.