Campo De Flores Y Soles

9

Tengo la presión en el pecho, soy consciente de todos mis latidos y llegan a sumbar mis oídos.
Mis pies se vuelven resbaladizos y no los siento míos.
Logro identificar los escalones de mi edificio.
Por poco no lo veo.

-Oye que ocurre? - se levanta y se sacude las manos en su pantalón.- Stela que paso? - Helio me toma de los hombros.

-Yo tengo que meterme voy tarde y Diana, la señorita Diana de seguro ya me llamo. - volteo como puedo a la puerta cerrada. Asustada.

-Stela corriste? Estas toda roja - empieza a molestarme los mechones de mi cabello pegados con mi sudor a la cara. - Por qué no respondías?

-Yo, en verdad, quiero entrar, por favor - se me quiebra la voz y sus manos bajan por mis brazos.

-Pero que sucede?! - voltea a la dirección de la calle justo de donde vine- Y tu móvil? - su expresión cambia - Te asaltaron?!

-Que? No. - Sus palabras me resultan absurdas

-Y por que no respondias? - Me mira directo a los ojos.

Dejame ir.  Solo quiero descansar. - me safo de su contacto y me meto corriendo en busca del elevador.
Y antes de cerrar las puertas de este el mete la mano para poder entrar.
Me saca un susto de muerte.

-Stela...

-No, Helio, solo estoy exagerando, te lo juro no paso nada, lo estoy llevando a otro nivel y lo que esta pasando es normal.  - el elevador se abre y su acercamiento me agobia, no dejo de respirar de manera ruidosa y trato de convencerme.

-Stela que sucede? No estas bien y lo noto y me frustra, quiero ayudarte- Helio sigue con sus palabras cuidadosas y sutiles.

-Nada, no sucede nada. Solo quiero dormir - mi respiración cuesta tanto que siento que es por culpa de todas las paredes y puertas.

-No parece que te suceda nada, solo dejame ayudarte- me sigue por el pasillo.

Llego a mi puerta y cuando estoy por tomar el pomo sigue ahí.

-Stela, no sé qué pasa, estas bien? Olvidalo... Cuéntamelo cómo tu quieras y cuando quieras - me giro a él dejando la puerta a mi espalda.

-Que haces aquí, Me estabas esperando? - volteo a mis zapatos evitando verle a los ojos

-Solo pasaba por aquí y te estuve llamando, ya sabes, para salir o algo y no contestabas.

-Cuanto llevas esperándome?

-Creo que una hora

-Por que esperaste tanto? Te hubieras ido - Le digo preocupada.

-No sé algo me dijo que no estabas bien. - Suspira-creo que no me he equivocado, puedo pasar? - da un paso al frente quedando más cerca mío.

-Estan prohibido los chicos en los dormitorios - Digo nerviosa - Y mas de esos que traen problemas. - Digo bajito.

-Crees que causó problemas? - su sonrisa de lado es una prueba clara de que estoy en lo correcto.

-No sé , fuiste un buen chico con Britt?- en cuanto lo digo me arrepiento.

-De qué hablas, Tienes problemas serios con ella, no? - su tono burlon me hace explotar. Como puedo sentir tantas emociones en un solo momento? , es como si lo que acabará de vivir hubiera sido en otro día y mirenme ahora estoy aquí, con un chico en mi puerta coqueteandome.

-Y a ti que te importa, vete de aquí antes de que grite. - Terminó diciendo.

-Oh si no que? Vendrá la señorita Diana? - Se ríe y voltea para el costado de un pasillo. Se acerca a mi y trata de jugar con mi mano en seguida doy un respingo y me encojo.
-Stela que sucede?! Por que estas así?- su mirada refleja verdadera preocupación- No te voy a mentir si llegue a pensar que eras una persona que expresa más de una emoción al mismo tiempo lo cual no es usual, pero yo solo te quiero coquetear - Giro los ojos- y tu estas toda arisca.

-No fue una buena noche, solo necesito descansar. Y perdón.- Digo avergonzada.

-No tienes porque disculparte por nada, ven vamos hacer una noche agradable.- ahí de nuevo su coqueteo y esa sonrisa, imposible que lo deje, es parte de él. Toma mi mano y cruza por mí puerta.

Su tacto es cálido y me siento segura, me doy cuenta de su aroma fresco y llena mis pulmones calientes por el esfuerzo, lo veo de espaldas y el recuerdo de él tomando mi mano y llevandome detrás de él me ataca.

***
-Hey, se que en verdad quieres un Helado pero Stela ya comimos uno ayer.

-Y eso que!? Hoy es hoy. - me cruzó de brazos y hago un puchero.

-Te comprare uno solo si me prometes antes que comeras bien. - Se ríe.

-Si como bien- digo indignada.

-Stela, frutas y verduras - levanta una ceja y ríe al ver que sigo con los brazos cruzados.

-Esta bien-Digo de mala gana.

El toma mi mano descruzando mis brazos, veo mi muñeca con su mano tomando de la mía yo un poco atrás pues el me está llevando y estoy viendo su espalda y su brazo bien formado; Justo como ahorita.
El recuerdo desaparece así como llegó

***

Se sientan en el pequeño sillón de un también pequeño escritorio en la esquina.

-Stela es muy bonito este lugar - Sigo desconcertada por el recuerdo y casi no lo oigo.

-No sé ya no quiero estar aquí.

-Te quieres ir?

-No, quiero mudarme a uno mas grande con Beth.

-Ahh ya, quieres hacer algo? Vemos una película?

-Yo...

-Hay una muy buena en Netflix o eso dicen podríamos verla

-Es muy tarde Helio y no deberías estar aquí.

-No sé qué pasó o que sientas pero no puedo dejarte sola, puedo ver como te esta lastimando algo y si no me lo quieres contar esta mas que bien pero sola hoy no te quedas. - Toma mi laptop del escritorio y se sienta al pie de la cama, yo quedo sorprendida en como tuvo la delicadeza de sentarse en el piso y no en la cama para hacerlo incómodo e íntimo. - Ven - me jala de la muñeca y hace sentarme a su lado. Me quedo mirando la pantalla y aguantando la respiración.
Porque cuando estas tan nerviosa se te olvida respirar o no te das cuenta de que no sueltas el aire.

-Stela necesito tu contraseña - me da un empujón en el hombro.

-Yo la pongo - Trato de levantar la laptop de sus piernas.

-No, solo dímelo yo la pongo.

-No Helio yo la pongo tal vez un día me Hakeas.

-Stela por favor si te pudiera Hakear ya no te pediría tu contraseña - Dice entre risas.

-Pues me la pides para que no sospeche de ti Haker Mentiroso. - Me rio también.

-Solo dímela y ya, ya estuviéramos viéndola. - me mira a los ojos - Si tienes Netflix verdad?

-Helio claro que si - suelto una verdadera risa al ver su cara de preocupación - Dame la laptop yo la pongo.

-Stela solo di la y ya. Dios! - Siento como esa sensación que se produce en tu panza cuando ansias algo se va creando y pueda verla en el también. La desesperación de que quiere la contraseña y la mía al ponerla.

-Dios! no aceptas un no por respuesta verdad? - terminó mirándole ahora yo directo a los ojos.

-Entonces, cuál es? - Contesta reafirmando la acusa.

-Agosto

-El mes?

-Si

-Por qué?

-No sé

Y nos quedamos viendo la película.