Prologo

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Eri caminaba detrás de su madre, nerviosa, era la primera vez que estaría mucho tiempo en aquel escuela con todos los maestros y alumnos y admitiría que se sentía algo intimidada, había alfas muy altos, omegas muy hermosos y betas que sobresalían, no era cualquier lugar.

-Eri, no tienes porque sentirte mal, fue solo un pequeño error, todos lo cometemos, correcto?- expreso shota agachándose a la altura de su hija la cual lo miró con los ojos cristalinos

-pero...te distraje de tu trabajo...- expresaba nerviosa La Niña recibiendo una caricia de cabello de parte de su madre

-yo estoy para ti siempre, para eso son las mamás, no?- pregunto shota recibiendo un asentimiento entusiasta de la menor

El mayor tomo la mano de La Niña y siguieron caminando por los pasillos.

Shota aizawa, un profesor muy reconocido dentro de la UA, omega dominante, encargado de la clase 1A, pero sobre todo madre soltero de dos niños, un joven de la misma escuela llamado shinso y una pequeña niña llamada Eri.

Todos en la escuela miraban con sorpresa y ternura a aquella tierna niña que tomaba la mano del profesor, era completamente diferente a él, cabello claro, azulado casi blanco, ojos rojos como la sangre y de su cabeza salía un pequeño cuerno.

-madre, porque no me dijiste que fuera por Eri?- expreso un alfa que corría hacia el omega mayor que detuvo su paso

-hermano!!- gritó la menor emocionada corriendo hacia el alfa el cual la cacho y sostuvo entre sus brazos

-deberías estar en tus clases- expreso el omega con el ceño fruncido

-terminaron antes, me quedare con Eri hasta que termines- expreso el alfa a lo cual el omega asintió y tomó su hombro en forma de aprobación

-tardare un poco, tomen un poco de dinero y coman, Eri aún no a comido- expreso el omega entregando dinero al alfa el cual asintió

No era un secreto la relación sanguínea de esos dos, pero incluso hasta los profesores se preguntaban quién sería el alfa que había logrado capturar a aquel omega o el porque este siempre estaba solo y sin marca.

-Eri, tienes que ser una buena niña en lo que esperamos a mamá, después iremos a casa- expreso el chico de cabellos despeinados hacia la menor la cual asintió con una sonrisa

Tanto madre como hijo eran personas muy silenciosas, con caras atractivas pero siempre serias, aunque de algún tiempo para acá aquello había estado cambiando para shinso gracias a que cierto rubio de la clase A había comenzado a coquetear con el, claro que no le hacía mucho caso pero le era divertido creer que alguien tenía interés en el.

-shinso, y papi pronto vendrá?- pregunto la pequeña apenas se sentó en el asiento del comedor

-Eri, te lo dije, papá no vendrá pronto, el hace otras cosas importantes- dijo el joven incómodo e irritado doblando su vista de lugar

-pero mami está muy cansado, papi debería estar aquí ayudándolo, como la familia de mis amigos- expreso la pequeña con el ceño fruncido

-el hace otras cosas, yo soy el que ayuda a mamá, mamá estará bien si Eri se porta bien- expreso shinso un poco más calmado a lo cual la menor asintió y se cruzó de brazos

Siempre era la misma respuesta ante la misma pregunta, donde estaba su padre ahora y porque no ayudaba a su mamá?. La pequeña percibió un aroma extraño, era dulce y fuerte, la atraía, su instinto de aventura se activó y no tardó en levantarse de su asiento y correr tras ese aroma misterioso que la llamaba. Shinso, por su parte, simplemente hacia girado la vista un segundo para ver si cierto rubio no se encontraba cerca para saludarlo simplemente.

-Eri, si vez un rubio de ojos miel avísame porfa- expreso el alfa aún distraído esperando alguna señal de su hermana- Eri?- pregunto y giró la vista hacia un asiento vacío

El alfa rápido se levantó de su asiento y miró hacia todas partes, aunque no era hora del almuerzo la cafetería se encontraba llena de muchas personas que como el habían acabado clases antes. Corrió por todo el lugar buscando una pequeña niña de cabellos celestes y vestido rojo, corrió hasta chocar con una persona haciendo que ambos cayeran al suelo.

-oh lo siento mucho, estoy buscando a alguien- expreso el peli morado algo asustado intentando levantarse viendo como le ofrecían la mano

-puedo saber quien es?- expreso una sonrisa burlona de un omega rubio el cual hizo sonrojar a shinso

El alfa tomó la mano de este y se levantó rápidamente desempolvando sus ropas viendo como el rubio venía acompañado de sus amigos.

-necesito encontrar a mi hermana- dijo este entre desesperación

-asi que era cierto que el profesor aizawa había traído a su hija menor aquí?- expreso una chica de piel rosa emocionada ante la idea

-de fue corriendo y no se por donde tomó, es pequeña y tiene el cabello celeste, tiene un vestido rojo y ojos rojos....- expresaba el alfa nervioso intentando describir cómo se veía La Niña

-no es la que estaba con el profesor mic hace un momento?- expreso un pelirrojo llamando la atención de el de pelo alborotados

Shinso corrió hacia donde creía estaba el profesor y su hermana ignorando por completo al grupo pasado, corrió por unos momentos por los pasillos hasta llegar al salón de la clase 1A, exactamente, ahí se encontraba el profesor y su hermano más no su madre, suspiro aliviado y tomó paso hacia adentro llamando la atención de la menor la cual corrió hacia el y lo abrazó

-shinso mira, encontré a papá- grito la menor emocionada llamando la atención del alfa menor el cual miró a su profesor nervioso

-Es lo que le quiero explicar desde hace rato, no soy tu padre pequeña, me encantaría tener la dicha de serlo pero no lo soy- expreso el alfa con una sonrisa nerviosa

-pero tu olor, así a de oler papá, tú eres papá, shinso, el es papá cierto?- pregunto la menor mirando a su hermano con la ilusión que este le diera la razón

-no Eri, el es un profesor, tal vez su olor te es familiar porque trabaja junto a mamá- explico el alfa menor a lo cual La Niña hizo un puchero

Rápidamente todos centraron su vista a la entrada del salón donde se observó a un aizawa muy cansado entrar apresurado y dirigirse a shinso, este entro un poco en pánico al ver la furia en los ojos de su madre más este sólo fue por la pequeña y la tomó entre sus brazos escondiendo su rostro en el cuello de él.

-mamá está aquí, tranquila- susurro shota mientras acariciaba la espalda de esta

-shinso es un mentiroso, dice que no es papá....- acusó la menor entre lágrimas logrando que el pelo negro lanzara una mirada amenazadora al menor el cual se escondió detrás de mic

-shota, lo siento, es un error, la pequeña cree que soy su padre, podrías explicarle bien, tal vez su verdadero padre se enoje que llame así a otro alfa- explico el rubio nervioso a lo cual el pelo negro frunció el ceño y giró la mirada

-shinso, vamos a casa- fue lo único que dijo este a lo cual el menor salió de su escondite y asintió para ponerse al lado de él omega mayor

Feliz primer día escuela UA.

Un novio para papá Donde viven las historias. Descúbrelo ahora