❝Jimin se caso con jungkook, pensando que este era el hombre perfecto. ❞
Pero resultó no ser así.
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- ↱CONTENIDO PARA ADULTOS, ES SU RESPONSABILIDAD LEER O NO. ˊˎ-
-↱CON TEMAS DELICADOS.
-↱HABLA VULGAR.
-↱TRES CAPÍTULO.
-↱JUNGKOOK ; TOP...
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Es una lástima dejar mi encantador cuchillo, sufriendo por estar llena de tu horrenda sangre, Lee taemin.
Narra jeon jungkook.
Antes del asesinato.
Cuando deje a jimin encerrado en la habitación, ya tenía planeado lo que haría con el vecino ese, al que tanto aprecio le tenía su pequeño. -Lo mataré. - Si, lo haría ahogarse en su propia mierda. Lo dejaría inerte. Las asquerosas imágenes de el mismo desmembrando poco a poco aquel cuerpo, con un costoso cuchillo kosher. Pero claro que nadie sabría que yo lo asesine. ¿Por qué no utilizar a choi Minho? - Todo saldrá a corde el plan y ese hijo de puta va a pudrirse. -
Baje las escaleras sin prisa aparente, para salir al frente, observando si no habían demasiadas personas alrededor. Sólo necesitaba que taemin fuera a la cafetería. Sabía que estaba jugando con fuego al asesinar a un chico en un lugar público, pero quemarse estaba en mis planes. Soy inteligente, no me confiaré sin antes tener la mente fresca de ideas.
Al fin y al cabo es mi especialidad matar personas necias. Sonrió, algo eufórico al recordar mi pasado. Estos años fueron caóticos para mi querido park. No sabe lo que hago, lo manchado que me encuentro.
- Uh, jeon basta de charlas mentales contigo mismo. - abro la puerta. Lee había entrado a su auto, ese pedazo de chatarra, junto a una caja rosada, parecía un obsequió. ¿Así que es más puto que mi jimin?. Muerdo mi labio totalmente excitado, del solo imaginar cuanto disfrutaría viéndolo muerto entre mis ásperas manos. Utilizaría a su conquista, para crear una magnífica escena de terror. Crearía mi historia, como stephen king.
Me dirigí hacia mí Mercedes-Benz, tengo dinero en demasía. No debía ocultarlo de los demás, tengo a mi chico lleno de lujos, mi muñequito. Como no recordar la primaria, cuando le vi por primera vez, era idéntico al muñeco que diseñé a los seis años. Mío, únicamente mío
El tipo, ya se había marchado. Tenía que esperar un poco, no podía descubrirme, ni reconocerme, se haría un escándalo.
Lo seguía, sabiendo claramente a donde iba, pero en estos casos, me rehusó a no asesinarlo en estos precisos momentos. chocando su auto contra el mío, si es que salía ileso. Cosa que dudo. Prendo el auto, y me voy al ver que ya había esperado lo suficiente.
En el camino todo fue más tranquilo, solo que seguía pensado en mi esposo. Tenía que ser rapido, para llegar antes de que despierte.
No debía preocuparme ahora, matarlo lo quitara de mi camino, es una basura en medio del cendero, no se puede reciclar. ¿Será seguro? Mi deseo de destrozar su cuerpo, eran inmensas. No había problema alguno, me tomaría poco, lo lograría, saldría con las manos limpias. -El baño, sería lo último que vería Lee.
Jeon llegó a su destino. La famosa cafetería del empresario min yoongi. Su ex mejor amigo, ese hombre lo odiaba, repudiaba. Desde que descubrió que este sentía cosas por su esposo.
