Parte 148

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Ye Tianxin sintió como si la sangre en su cuerpo se estuviera congelando.

En el corazón de Ye Tianxin, un dolor inexplicable se estaba extendiendo gradualmente.

Extrañaba a su abuela.

Echaba de menos a su madre.

Extrañaba al hermano Li.

Quería ver a Xie Xuning. Quería preguntarle personalmente si ella era su padre.

Ella no quería morir todavía.

Ella no quería morir en absoluto.

Quería preguntarle a su padre por qué nunca la buscó en su vida pasada y actual.

Extrañaba a Xiao Jin aún más.

Aturdida, pareció escuchar la voz de Xiao Jin diciendo en voz baja: "Mami, ven aquí ..."

Ye Tianxin parecía tener alucinaciones ...

Xiao Jin se puso en cuclillas lentamente frente a ella y extendió su pequeña mano. Él le acarició suavemente la cara y le susurró: "Mami, Xiao Jin te extrañó ..."

"Xiao Jin".

Los ojos de Ye Tianxin se llenaron de lágrimas. Extendió la mano y tocó con amor el rostro de Xiao Jin.

"Mami, vámonos".

"Estupendo."

La mano de Ye Tianxin fue sostenida por Xiao Jin, quien la llevó paso a paso en la oscuridad.

"Tianxin".

Frente a ella, una puerta pareció abrirse.

Una luz brillante brilló.

De la luz y la sombra, emergió aquella en la que ella pensaba constantemente. Su rostro estaba oculto en la oscuridad y su figura era sorprendente.

"Hermano mayor Li ..."

Xiao Jin levantó la cara y dijo: "Mami, ¿no te vas?"

Cuando Ye Tianxin vio la cara de Xiao Jin, su corazón se derritió. Abrió la boca, pero no pudo decir una palabra.

"Tianxin, ven aquí. Sé bueno..."

Xiao Jin se paró frente a Ye Tianxin y miró a Li Qingcang con crueldad.

"¡Chico malo, no me quites a mi mami!"

Li Qingcang salió de la oscuridad. Su rostro y el de Xiao Jin parecían superponerse.

"Bribón, esa es mi mujer".

Li Qingcang caminó hacia Ye Tianxin. Su brazo estaba firmemente alrededor de Ye Tianxin.

"¡Pequeño mocoso, piérdete!"

Xiao Jin rompió a llorar. "¡Papi malo! ¡Papi malo! ¡Te odio!"

Xiao Jin, hermano mayor Li ...

Ellos...

En ese momento, Ye Tianxin finalmente entendió por qué sentía que el rostro de Xiao Jin era tan similar al rostro de Li Qingcang.

Sus ojos se hundieron.

Su respiración también se ralentizó.

Tenía mucho sueño.

Tenía muchas ganas de dormir.

Ella sentía nostalgia.

Echaba de menos las cerezas de Jiameng Town. Esas cerezas agridulces ...

MATRIMONIO SECRETO: Renacido como una estudiante modeloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora