Fix era un alma perdida, sin rumbo alguno, y esto le afectaba muchísimo, sentía que necesitaba algo, pero ese algo no era saber su último destino, necesitaba compañía, pero... ¿quién podría acercarse a él? Nadie en su sano juicio lo haría, todos los que lo conocían se alejaban, por distintas razones; se sentía una mierda, un fracaso.
Pero un día llegó You, un alma perdida, como Fix, pero la diferencia es que él no estaba buscando a nadie o nada en particular, estaba despreocupado; vio al susodicho a lo lejos así que decidió acercarse para acompañarlo, de repente sintieron algo extraño, ellos ya se conocían, pero no se recordaban. Se acercaron, cortando toda distancia posible, y una luz iluminó todo el lugar. Despertaron transformados, ya no eran almas, ahora eran cisnes, unos bellos cisnes blancos, que estaban destinados, sin saberlo, a estar juntos por siempre.