Prologo

530 32 8
                                    

Un lugar en el que has estado la mitad de tu vida sin poder salir, solo y sin nadie más, solo... una niña con la cual tenía una amistad muy buena.

Algunos pensarían que es simplemente deprimente... y lo es, pero lo soportan.

—Las personas que están afuera... seguramente pueden ser felices, mientras yo solo estoy aquí...sin algún tipo de felicidad...

Pensaba un Joven de tan solo 15 años, pero fue sacado de sus pensamientos cuando una chica lo llamo.

—Tomioka-san... ¿Estás pensando en lo de siempre?

—¿Cómo lo supiste?...

—Desde que estamos aquí, es en lo único en lo que piensas...

—Supongo que tienes razón... pero, parece que todos pueden ser felices menos...nosotros dos.

La chica se acerco a donde estaba el y se sentó.

—Se como te sientes... pero, ami me duele mas reir que llorar. No hemos salido de este lugar desde que tu tenias 5 años y yo 3.

—Los dos tenemos 10 años de soportar esta tortura, no entiendo qué fue lo que hicimos para merecer esto.

—Nuestros padres...

—¿Nuestros padres?

—Si... hace poco, escuche decir a Akira-sama que estamos aquí por las acciones de nuestros padres y su castigo era quitándoles lo que más querían.

—¿Nosotros?

Shinobu asintió.

—En pocas palabras...

—Estamos pagando el castigo de nuestros padres.

—Así es...

—Espera ¿Akira-sama estaba hablando con alguien?

—Si, pero no preste mucha atención a eso. ¿Por qué la pregunta?

—Existe una pequeña posibilidad de que escapemos.

La pequeña de 13 años se sorprendió, no solo porque tenían la oportunidad de escapar, si no que su amigo estaba emocionado.

—¿En verdad lo crees?

—Si, la posibilidad es... de un 10% si no me falla.

—Pero eso es muy poco, no creo que sea buena idea.

—Kocho, en estos diez años no teníamos ni un 1% de posibilidades, ahora hay un 10%, se que es muy poco... pero hay que intentarlo.

—Yo...

—¡Shinobu!

—A-Akira-sama...

—Se supone que deberías estar haciendo tus deberes, al igual que tu Giyuu.

—Y-yo ya termine los míos, A-Akira-sama.

—A ti te la paso Giyuu, pero qué hay de ti Shinobu, no me obedeces.

—N-no es que no la obedezca es qu-

Fue callada por un golpe.

—¡No me importan las excusas! ¡Sabes tus obligaciones y aun asi me desobedeces! Ahora harás todos los de la casa, no me importa si es mucho, lo harás de castigo.

Ella asintió tratando de retener sus lágrimas.

—¡NO ESCUCHE SHINOBU KOCHO!

—S-si Akira-sama.

Akira la tomó del brazo y se la llevó arrastrando hacia el sótano para que le diera una "lección".

—Perdóname kocho... yo no puedo hacer nada...

Ambos habían aguantado eso desde que llegaron al lugar, dolor y sufrimiento eran los principales sentimientos que tenían, al igual que culpa. No podían hacer nada cuando ella los regañaba, y si lo hacían les iría muy mal.


ღ𝓡𝓾𝓷 𝓪𝔀𝓪𝔂 ཻུ۪۪⸙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora