El lazo del destino ( Freddica)

Capitulo 15

- ¡AH! Me duele mucho la cabeza, siento que en algún momento me va a explotar -con dos dedos, Tony presionaba su frente, probablemente pensaba que así disminuiría el dolor- ¿Creen que, si le decimos a Freddy que nos del día libre, lo haga?

- Quita esa posibilidad –todos estaban con sus uniformes y en la sala de fiestas ya que uno de los millonarios del país quería rentar por un día el local para el cumpleaños para su hijo y necesitaban a todos- solo será un rato.

- Eso espero.

Las cuatro chicas estaban en fila con sus lentes de sol, unas paradas y otras sentadas. Aún tenían que pasar por la resaca, por la noche anterior, no podían ni consigo mismas, solo estaban ahí por el compromiso de su trabajo y porque Freddy las amenazo.

Christina, sin prestar mucha atención a su alrededor, estuvo pensando a donde llevar a Freddy para su cita, ya que necesitaba confesarle las cosas sobre su llegada, aunque él ya lo sabía, necesitaba que él lo escuchara de su propia boca.

- Entonces, ¿Cerramos el trato? –Freddy estrecho las manos con el hombre, forma de que el trato estaba hecho-

- Tu padre tiene razón, has crecido muy bien, esto de los negocios eres muy hábil –el hombre halago a Freddy, logrando que este sonriera-

- Solo hago lo que mi padre y hermano me han enseñado, lo acompaño hacía la salida –los dos hombres habían desaparecido de la vista de los trabajadores, logrando que todos resoplaran-

Unos de los meseros los llevo a las chicas agua con una píldora para que les dejara de doler la cabeza, estas agradecidas tomaron toda el agua.

- Necesitan comer algo súper picoso para que se le pase –sugirió Tedd- ¿conocen el ramyon? Joder, es súper picoso, pero si no quieren gastar, en la cocina hay chiles, solo tomen uno y muérdanlo.

- Tedd, eres cruel con tus ideas –reclamo Christina- la última vez me aconsejaste que me cortara una oreja cuando dije que me dolía –Tedd solo soltó una risita-

Freddy apareció con una gran sonrisa en la sala, estaba de buen humor y más seguro por el gran trato que cerro, al estar cerca de los chicos miro a Christina y le sonrió, Tony al notar esto miro a ambos con el ceño fruncido.

- Bien, ¿Qué pasó con el señor? ¿Paso algo importante? –Freddy miro a Tony, esta le sonrió-

- Si –tomo una silla y se senté enfrente de ellos- aparte de querer rentar el restaurante para la fiesta de su hijo, nos dará promoción durante un año y si las ventas mejoran, más de lo que han estado en los últimos meses muy probable que el contrato sea permanente. La siguiente semana volverá para firmar el contrato, mi padre estará muy feliz por esto.

De verdad estaba feliz, sus pupilas estaban dilatadas y una gran sonrisa iluminaba su rostro, Christina al verlo así sintió una pulsada en su pecho, como si su corazón quisiera salirse. Con sus manos; toco su pecho, tal vez para calmarse, hasta sintió las dichosas mariposas que tanto le contaban sus amigas.

- Christina esta roja –la mencionada giró la cabeza para ver a Tedd, lo miro desconcertada, sin querer todos la estaban mirando. Tedd toco su frente, para verificar que no tuviera fiebre- no creo que amerite que lo llame calentura, pero si estás muy caliente de tu cara.

- A lo mejor la resaca ya está saliendo –sonrió Christina para Tedd, este solo miro a otro lado con desagrado-

- Mmm... ¿Debería ponerte a dar vueltas sobre el edificio Maite? –esta soltó una sola carcajada de su boca por la pregunta de Philip-