Amor |Drarry|

Amor

Para Harry, el amor era algo muy complicado, cada vez que preguntaba su significado obtenía diferentes respuestas, y no era para más; pues realmente dudaba de la existencia de este.

—Tía Petunia, ¿Qué es el amor?

—Es algo que dudo puedas tener, ¿Quién querría amar a alguien tan feo y poca cosa como tú? Ahora, ve a limpiar que parado no sirves de nada.

Su primera conclusión del amor fue que tenías que ser hermoso para poder tenerlo.

En su primer año en Hogwarts, conoció a los que llamo sus mejores amigos, ambos al igual que él no conocían el significado del amor, pues cuando pregunto a Ron y Hermione, ellos citaron las palabras de sus padres.

—Mi madre dice que el amor es algo cálido que sientes en el corazón cuando estás con las personas correctas. — Dijo Ron, que en su opinión era el menos interesado en el tema.

—Mis padres me dijeron el amor es dar todo por aquellos que amas. Aunque yo opino que el amor no tiene nada que ver con eso.

Harry concluyó que el amor se podía sentir y tenía medida. En un principio le pareció una idea tonta porque él no era capaz de sentir esa calidez que Ron le menciono, y muchos menos era capaz de medir todas las cosas que haría por alguien.

Cuando los años pasaron y sus intereses cambiaron, olvido por completo el tema del amor, la vida le había jugado muchas malas pasadas y no tenía el más mínimo interés en conocerlo.

—Harry, deberías intentar salir de tu agujero de tristeza, la vida es muy hermosa como para vivir encerrado.

La guerra dejo muchos estragos en el corazón y mente de Harry, ya había pasado un año desde la caída de Voldemort, pero aún sentía que el peligro era una constante en su vida, y cuando dormía aún escuchaba las voces de todos aquellos que murieron a su causa.

—¿Dónde podría ir yo sin ser llamado Héroe del mundo mágico? Estoy cansado de ser alabado.

—Podemos ir a un bar muggle, dudo que las brujas y magos pasen su tiempo libre en esos lugares. —Contesto Hermione

—Compañero, honestamente necesitas un poco de diversión y de ser posible una pareja para no sentirte tan solo. — Intervino Ron.

El bar al que llego el legendario trio de oro estaba abarrotado de gente, al entrar fue muy difícil encontrar una mesa donde sentarse, pero después de un tiempo lograron encontrar una mesa retirada de todo el cúmulo de gente.

—¡Por Merlín! Este lugar está más lleno que el ministerio de magia. — Comento Ron quien había ido por las bebidas de los chicos.

—Fue una pésima idea venir, no tenemos ni espacio para respirar. — Harry se sentía estresado, tanta gente le ponía los nervios de punta.

—Vamos a bailar, tal vez eso nos pueda quitar todo esté bochorno. — Hermione se levantó y jaló a Ron hacía la pista de baile.

Harry se quedó solo, realmente salir no lo había ayudado para nada, y si lo pensaba mejor, tanta gente le recordaba el día de la batalla con gente viniendo y yendo por todo el lugar.

—Potter, que agradable sorpresa. — Frente a él se encontraba Draco Malfoy, no era como lo recordaba, ahora se encontraba mucho más atractivo y su cuerpo estaba más tonificado que en sus recuerdos.

—Draco Malfoy en un bar muggle, eso sí es una sorpresa. — Harry invitó a Draco a sentarse, desde los sucesos de la guerra ninguno de los dos volvió a dirigirse la palabra, sin embargo, entablaron una tregua no verbal después del juicio de la familia Malfoy.