Una chica muy pagada de si misma y muy caprichosa, se encuentra con una de las mejores agentes de élite del país. Y la atracción entre ellas es fortísima, tanto que las dos modifican aspectos de su carácter para poder estar con la otra. A pesar de s...
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Tetxu
Teo se llevó a Ricky, aún bastante asustado. Cuando llegamos a los coches vi a JuanLu, el cual me abrazó.
JuanLu: "¿Qué haces? Siempre metida en jaleos, no eres ya mayorcita para estos críos..."
Tetxu: "La madre que te trujo. Este chico nos ayudó a solventar una situación muy peliaguda, de ocultar un alijo importante de droga dentro de un centro educativo, con niños y adolescentes..."
JuanLu: "Conozco la historia, me lo ha contado Dito. Está con un cabreo de muy padre y señor mío..."
Tetxu: "Que le den..."
Cuando llegamos al Instituto, "Rambo" nos estaba esperando allí, una pregunta salió en mi cabeza. "¿Qué demonios está pasando?"
Araceli
Ya habían pasado varios días desde que el instructor vino a casa a interrogarme sobre lo sucedido en el asalto al banco y la mierda de "Rambo". La cara que se le quedó cuando le entregué el móvil del bueno de Aureliano, al cual le quité toda protección. Necesitaba los Whatsapp del asalto, aquellos que provocaron un tiroteo con varios inocentes por medio, pero hoy era la fiesta de mi graduación, bueno la mía y la de mis compañeros. Pero a Sigüe la avisaron de la Comisaría, espero que no ocurra nada grave, por lo que me fui sola con mis padres, Sigüe me prometió que iría en cuanto resolviera ese aviso, que le había dado Nico, de última hora en la Comisaría.
Nos fuimos hacia el cole, y nos indicaron que fuéramos hacia el salón de actos. Sonia ya la consideraba cómo una amiga, madre no porque la mía fue asesinada junto con su marido. Ya le iba contando mis cuitas, el tiempo que estuve herida, ella fue un gran soporte para mí. Durante las, por fortuna, pocas peleas que tuvimos Sigüe y yo, siempre estuvo ahí para nosotras nos apoyó, tanto o más que mi padre, ahora no nos extrañamos cuando le digo "mamá".
Empezó la ceremonia, que era en dos partes, delante había varias filas vacías sin nadie sentado, y en el escenario varios asientos dispuestos para sentarse a quienes llamasen. Empezó D. Javier, el Director, hablando ese era su último año ya que se había jubilado, pero como le quedaban pocos días para las vacaciones pidió retrasar su jubilación esos días, y nos explicó cómo se desarrollaría la ceremonia, en primer lugar, llamarían a todos los que habían aprobado el curso, y en segundo lugar llamarían a los que habían aprobado la selectividad, a estos últimos nuestros profesores y compañeros irían haciendo preguntas sobre los estudios que íbamos a seguir. Al principio de la ceremonia, ocurrió la primera sorpresa: Aureliano tenía que repetir curso, ya que no había aprobado ni una asignatura, ni siquiera "las marías", lo cual trajo una mueca de disgusto en su madre, pero lo mejor vino cuando Ángela aprobó con una de las notas más altas de la clase. La carita de Aureliano hablaba por sí sola, llevábamos ya casi dos horas y media cuando comenzaron a nombrar los que habíamos aprobado la selectividad. En este caso el tiempo de espera se redujo en cuarenta y cinco minutos.
