No Volveré A Perderte (Todoroki Fem) (En Revisión)

Capitulo 26 USJ - V

Los héroes exiten para salvar a las personas. Esa es la verdad detrás de su existencia. Sin embargo, las personas no solo deben ser salvadas de desastres naturales y accidentes fatales, también deben ser salvadas de otras personas; de gente irracional que usa sus Dones para hacerle daño a otras de manera intencionada.

Lo cierto es que los héroes no fueron los primeros en aparecer desde la llegada de los Dones. Los villanos llegaron primero, después vinieron los vigilantes. Ese simple hecho habla con claridad de la oscuridad en la naturaleza humana.

Suneater estaba enfurecido. Tal sadismo en una persona... Absolutamente imperdonable.

Sus pies estaban descalzos para facilitar el uso de su poder, por lo que podía sentirlo con claridad. La calidez inquietante de la sangre salpicada por el suelo de esos dos jóvenes héroes manchando sus pies.

"¿Qué es para ti la vida...?". Su voz fue apenas un susurró, pero no por su timidez habitual. Era por la rabia ardiente que subía por su garganta y hacía hervir su sangre.

"Interrumpiste mi diversión. Voy a matarte". La chica ignoró la pregunta y se puso de pie. Su rostro bonito estaba distorsionado por la ira pura. Sus ojos color miel estaban ensombrecidos y la pupila rasgada como la de un gato le daba una apariencia atemorizante.

¿Diversión...?.

Tamaki apretó con fuerza sus manos. La chica se inclinó ligeramente y saltó a una velocidad increíble.

Inaceptable.

Tamaki es el tipo de persona silenciosa, callada y paciente; a la que puedes molestar amigablemente durante horas y solo va a mirarte con candancio. Sin embargo, eso no significa que era incapaz de enojarse, solo que su nivel de tolerancia es muy alto.

Y esa tolerancia se había agotado desde el momento en que vió a dos prometedores héroes desangrándose en el piso.

"Muérete". La chica sacó dos grandes agujas que guardaba en su suéter color amarillo. Apuntó hábilmente al cuello para provocar una muerte rápida.

Tamaki se agachó, las armas pasaron inofensivamente frente a sus ojos. Un golpe rápido a la mandíbula obligó a su oponente a retroceder. Su contraataque no terminó ahí, rápidamente puso a funcionar su Don: Manifiesto. La forma de su mano se retorció y se alteró hasta tomar la forma de una tenaza como la de un cangrejo. Esta se enredó en el antebrazo de Himiko y lo apretó como con la fuerza de una compresora. Su hueso se rompió con un sonido desagradable.

Himiko se mordió la lengua para soportar el dolor y lanzó otro puñalada. Tamaki esquivó moviéndose a un lado, dándole tiempo a Toga para retroceder.

Himiko Toga pasó su lengua por su labio roto debido al puñetazo del héroe y saboreó el dulzor metálico de su propia sangre. La aguja que Tomura le había dado se deslizó de su mano y su brazo colgó inútilmente.

Sin embargo, más que adolorida; Toga estaba enojada.

"¡Ríndete!". Su sola libertad representaba un peligro para los demás. Suneater entendió este punto y se preparó. Su movilidad estaba limitada porque no podía permitir que se acercará a esos dos niños inconscientes.

Toga odiaba a ese tipo, y también sabía que no había forma de que pudiera ganarle sola. Esa no era su misión tampoco.

Tamaki iba a ir con todo, no había razón para contenerse y tenía que ayudar a sus compañeros.

"¡¿Lastimar a otros te parece divertido?! ¡¿Qué está mal con tu cabeza loca maníaca?!". Suneater gritó.

"Tu eres el raro para mí. ¡Los héroes ven normal salvar a los débiles y lastimar a los villanos! ¡Para mí es lo normal querer tomar la sangre de las personas que me gustan!".