No Volveré A Perderte (Todoroki Fem) (En Revisión)

Capitulo 5 Perdónate (Revisado)

Perdónate.

Shoto regresa a casa después de un agotador entrenamiento, sintiendo que cada músculo de su cuerpo protesta con cada paso. Al entrar, se encuentra con Fuyumi, quien le da la bienvenida. El aroma tentador de la comida recién preparada por su hermana llena el aire.

Rápidamente, la heroína se quita los zapatos, y asciende las escaleras hacia su habitación. El suelo de madera cruje suavemente bajo sus pies cansados. Al llegar a su destino, se despoja de la ropa de entrenamiento empapada en sudor y suciedad, se da una ducha rápida y se envuelve en la suavidad de una pijama holgada de color celeste. La suavidad de la tela acaricia su piel, mientras la heroína se libera del peso físico y mental del día.

Shoto, ansiosa por disfrutar de su cena antes de que perdiera su calidez, bajó apresuradamente las escaleras. Al llegar a la cocina, se encontró con su padre y su hermana sentados a la mesa. La atmósfera estaba impregnada de un silencio incómodo, como un eco chirriante que se aferraba a la habitación.

La mesa estaba adornada con platos humeantes y deliciosos aromas, pero la ausencia de su hermano Natsuo, quien prefería cenar en su habitación alejado de su padre, dejaba un espacio notablemente vacío. Shoto tomó asiento. Desde que la heroína había desatado sus habilidades Don, Endeavor no encontraba motivos para quejarse sobre ella. Si quisiera mostrarle un nuevo truco o técnica, ella lo sorprendería mostrándole que ya la conocía. Incluso sus más preciados movimientos secretos fueron dominados con facilidad por Shoto.

El silencio incómodo en la mesa era el eco de la transformación en la dinámica familiar. Antes, las cenas solían ser rutinarias y silenciosas, acompañadas de vez en cuando por gritos o insultos, pero desde que la hostilidad de Shoto hacia su padre había cesado y era abiertamente amigable hacia él, todo se había puesto raro en casa de la familia Todoroki. El héroe profesional no entendía muy bien como corresponder a las muestras de amabilidad.

A pesar del aroma apetitoso y la comida deliciosa, la cena transcurría en quietud. La heroína, mientras intentaba saborear cada bocado, notaba cómo su padre se notaba cada vez más introspectivo hacia sí mismo.

Para Shoto, su padre fue redimido hace un buen tiempo. Incluso si las cicatrices emocionales causadas por él todavía estaban profundamente marcadas, ella ya lo había perdonado. Porque para bien o para mal, esas cicatrices forman parte de lo que ella es. Y le guste o no, Endeavor siempre será su padre.

"Conseguí la Autorización Temporal del Departamento de Seguridad Pública. Podrás entrenar con tu Don afuera sin problemas". Dijo Endeavor mientras sacaba algunos papeles de su bolsillo y se los entregaba a Shoto. "Si un policía o Héroe hace preguntas, solo muestrales eso". Shoto asintió y guardó con cuidado la Autorización Temporal.

Al ver que la actitud incómodamente distante de su padre no va a acabar pronto, Shoto decidió dar un paso adelante. Por todo lo que le dió en ésta vida y en la anterior, le ayudaría con su terquedad y orgullo.

Aferrarnos a los errores de otros como anclas pesadas puede erosionar las bases de nuestras relaciones. Cada rencor, si se queda sin resolver, se convierte en una grieta que amenaza con expandirse y separarnos de aquellos a quienes apreciamos. Sin embargo, a menudo olvidamos el poder transformador de dos simples palabras: "Te perdono".

El perdón sincero es como tender un puente sobre esas grietas. Es reconocer nuestra humanidad, nuestras fallas y, al mismo tiempo, mostrar un compromiso genuino por reparar lo que se ha roto.

"Gracias papá". Dijo Shoto, dejando estupefactos a todos en la mesa.

Hace ocho años, Shoto juró que nunca perdonaría a Enji y lo desconoció como su padre. Desde entonces siempre evitó dirigirle la palabra a no ser que fuera absolutamente necesario y siempre se refería a él como "Tú" o "Viejo". Endeavor estaba de acuerdo siempre y cuando Shoto cumpliera con sus deberes.