Chapter five: Todo está bien, bebé.

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다섯

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다섯

Al siguiente día, Taehyung esperaba llegar a su salón con libertad y poder juntarse con su bonito compañero Jeongguk, estaba tan emocionado por invitarlo a su casa después de clases.

Cuando camina por los pasillos, se le hace extraño escuchar los murmullos mientras lo miran.

¿Es por lo de ayer? Sólo había golpeado a Yoongi, no era para tanto.

De acuerdo, si era para tanto. Yoongi era el capitán de Hockey y el más popular, era obvio que hablarían acerca del tema.

Por dios, debe ser ciego o muy estúpido por haber dejado a Yoongi hyung.

Taehyung frunce su ceño con molestia mientras aprieta la correa de su mochila, ¿por qué la gente era tan chismosa y odiosa?

Oh, él ni siquiera continúa con su camino. Se detiene a la mitad y se devuelve para encarar a esas dos chicas que murmuran sobre él porque así es, Kim Taehyung no se calla absolutamente nada.

Tal vez esa sea la razón por la cual a veces desespera un poco a la gente.

—¿Por qué meten su nariz en las vidas ajenas, eh? ¿La suya es tan aburrida que tienen que hablar de la mía?—Soltó con enfado, ambas chicas le miraron como si fuera lo peor y se marcharon ignorándolo rotundamente.

Por dios, ¿qué le pasa a todo el mundo hoy?

Suelta un gran suspiro antes de seguir con su camino hacia a la aula, nada va a amargarle su bonito día con Jeongguk.

Después de unos pasos más, cuando finalmente entra al aula, todos se callan abruptamente. Taehyung los ignora y se sienta en una butaca cerca de Jeongguk, su mochila no está, eso le parece raro considerando que el menor siempre es el primero en llegar.

Mira insistente a la puerta esperando por su llegada, quizás se le hizo tarde para el bus.

Los ojos de Taehyung se iluminan cuando visualiza a una persona acercarse, suspira derrotado cuando nota que sólo se trata de Hoseok.

—¿Ya estás feliz con lo que hiciste? ¿Te ha gustado meter en problemas a Jeongguk?

El castaño le mira sin comprender, su ceño se frunce intensamente cuando escucha el nombre de su mejor amigo provenir de sus labios.

—¿De qué hablas, Jung?

Hoseok parece molesto, sus puños están apretados y su mochila cuelga de su hombro. Como era de esperarse, escucha los susurros del resto del salón inventando nuevas cosas pero no le importa.

Su atención únicamente se enfoca en Jeongguk.

—Que por tu culpa toda la universidad está hablando pestes de Jeongguk cuando él no ha hecho nada malo. —Suelta sin dejar de mirarle con desagrado, a Taehyung no puede importarle menos. —¡No es justo que él este ahí llorando por algo que tú causaste! La maldita foto está por toda la escuela y no dejan de hablar sobre ambos.

Taehyung traga saliva y se levanta inmediatamente de su asiento, su expresión delata la angustia que siente.

—¿En dónde está, Jung? Por favor, dímelo. Necesito verlo. —Le pide casi entre súplicas, su pecho duele de sólo imaginarse a Jeongguk con lágrimas en su carita.

Hoseok parece dudar varios segundos sobre si decirle o no, finalmente se ablanda y decide decirle. No por él, sino porque quiere mucho a Gguk y sabe que probablemente Taehyung le sea de ayuda.

—Está en los cubículos del baño, no me ha dejado entrar.

Su respuesta es suficiente para que Tae tome su mochila y salga apurado del aula con miles de comentarios malos detrás de él cuando se va.

Es tanto su apuro que ni siquiera nota cuando se topa con Jimin en los pasillos, se disculpa rápidamente y sigue corriendo hacia a los baños.

—Maldita sea. —Murmura el castaño mientras sigue por los largos pasillos, puede observar a Yoongi reírse con descaro de él. Al menos también puede reírse del tremendo golpe que le dió en su cara de idiota y el moretón que luce en su ojo derecho.

Suspira con alivio cuando llega a los baños, deja su mochila en el suelo y comienza a fijarse en los cubículos uno por uno.

—¿Ggukie?

Cuando está en el tercer cubículo, escucha ruido proveniente del último, camina hacia allá y sabe que lo ha encontrado cuando observa su mochila por la ranura.

—Gguk, ¿podrías abrirme?—Le pide con preocupación, puede aguantarse lo que la gente dice sobre él pero no cuando se trata sobre Jeongguk, lo único bueno en su vida.

—¡A-Ahora mismo estoy muy avergonzado conmigo mismo, V hyung! Perdone por meterlo en problemas. —Responde entre suaves tartamudeos, Taehyung puede notar que sigue llorando y eso no le gusta.

Tampoco le gusta el seudónimo que usó para referirse a él, cuando Jeongguk consideraba que hacía algo mal usaba los honoríficos de vuelta y se disculpaba hasta la eternidad por ser una molestia.

Cosa que no era.

—No me has metido en problemas, sólo es la gente que parece estar pendiente de la vida ajena.

Gguk hipa desde el otro lado.

—Toda la gente..está allá afuera hablando cosas horribles de usted y de mí, V hyung.

—No me importa lo que hablen de mí mientras tú estés conmigo, Jeongguk-ah.

El pelinegro se queda en silencio varios minutos, Taehyung no dice y se limita a quedarse afuera para esperarlo. No se movería de ahí hasta verlo.

La puerta del cubículo se abre, Jeongguk está sentado en el suelo abrazado a sus propias piernas. Sus gafas están tiradas y sus ojos lucen húmedos mientras le mira expectante.

—A mí tampoco me importa lo que digan esas personas si tengo a alguien..como usted en mi vida, V hyung. —Lo escucha murmurar bajito, Taehyung no sabe la razón del porque sus manos sudan y su pecho parece un gusano revoltoso.

Y tampoco sabe porque se siente tímido ante los ojos de Jeongguk viéndolo.

—Todo está bien, bebé. —Suelta el castaño pidiéndole que se acerque, Jeongguk por primera vez no lo piensa y se pone de pie para abalanzarse hacia a su mayor y abrazarlo por la cintura.

Taehyung coloca sus brazos alrededor de su cuello y recarga su cabeza en el pecho del pelinegro.

Tal vez Jeongguk se enamoró otro poquito de su hyung hoy.

Y probablemente mañana tendrá un gran ataque de histeria cuando recuerde este momento.

MIS EX NOVIOS 랑, KOOKV |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora