Capitulo 4

96 8 0
                                    

JEON JUNGKOOK

-Lenin ya puedo moverme, siento las piernas adormecidas

Aun no joven príncipe, por favor no se mueva que casi termino, solo faltan algunos detalles y podrá irse.

-Es que, hace tres horas que estoy así, me urge ir al baño. Además, no es necesario pintar un retrato mío, es absurdo.

Que cosas dice joven príncipe, claro que es necesario, estos retratos serán enviados a todos los reinos aliados, para cuando llegue el día de su coronación - dijo el consejero real

-Ash...

Muy bien príncipe eso es todo por hoy, me encargaré del resto por mi cuenta. - dijo Lenin

-Hasta que por fin. Bueno entonces me voy

Y a donde va majestad- dijo el consejero

-Pues al baño a donde más, bueno adiós los veo luego.

Me dirigí a mi habitación y saqué aquella ropa del escondite, me vestí rápidamente y salí sigilosamente del Palacio.

Me sentí libre al fin, sin tantas responsabilidades, además esta noche se llevaría a cabo ese tonto baile.

Estaba acostumbrado a escapar del palacio además eso me permitía ver de cerca la decadencia que existía a fuera de Palacio y buscar la manera de solucionarlo, ese será mi propósito cuando sea Rey, aunque aún falta mucho para ese día. Pero eso no era todo me gustaría volver a verlo - dije suspirando

Sin darme cuenta ya estaba muy lejos y tenía hambre. De repente sentí un delicioso aroma y no solo eso, sino que lo acompañaba un hermoso canto, mis oídos sin duda estaban bendecidos.

- ¿Esa voz...dónde la escuché?

Hola mi alíen

Somos el misterio del otro

¿Es por eso que es aún más especial?

Un día cuando esta alegría se calme, quédate oye

Quédate a mi lado

Por la eternidad, quédate aquí oye

Como tu pequeño meñique

Más que siete veranos y fríos inviernos

Más que numerosas promesas y recuerdos...

Me acerqué con mucha cautela al lugar de donde provenía aquella voz y quedé sin habla. Era él, acaso destino quiso que nos encontráramos, pero eso no era todo, mi corazón... algo raro le pasaba, quería brincar de mi pecho. Aquel chico era hermoso, me quede observándolo y cada movimiento que hacía con sus pequeñas y blancas manos. Si me pedirían quedarme así, admirándolo, por supuesto que lo haría porque lo que mis ojos observaban eran simplemente la perfección.

Te puedo ayudar en algo o simplemente te quedaras ahí - dijo mirándome fijamente

- Eso me puso aún más nervioso- Yo... Yo vine a... a comprar algo para comer- contesté

¿Enserio? y... ¿traes dinero?, porque con esa ropa parece que te robaron.

- Mi nombre es J.... digo Kook y claro que traigo dinero, no te burles de mi ropa. Sabías que no es bueno juzgar a las personas por como visten - trágame tierra - dije, en voz baja. Era hermoso y su voz... era tan suave, eso me ponía aún más nervioso.

Claro que lo sé solo bromea. Kook - respondió Jimin

- ¿Y cuál es tu nombre?- pregunte ansioso

Jimin - dijo mientras decoraba un postre dorado

- ¿Y qué postre es ese? jamás lo vi

Lo dices enserio, acaso eres un viajero, todos en el pueblo lo conocen - comentó en un tono serio

- No, yo también soy de aquí, solo que no salgo mucho.

Entonces fuiste un prisionero - me miró

-No, claro que no, nada de eso, soy un aprendiz en palacio y por eso no salgo mucho.

No te creo, si lo fueras entonces ¿por qué vistes así? - cuestiono Jimin

- Bueno lo que pasa es que salí sin permiso y tuve que vestirme así.

Por el gesto que puso, creo que no logré convencerlo.

Este postre se llama Tong Ake - dijo, alcanzando el postre con sus regordetas manos, eran adorables...

- ¿Tong Ake?

Bueno este postre representa el amor y la felicidad, por eso se llama así

- Eso es muy interesante no sabia los postres tuvieran algún significado

Este lo tiene, porque es especial. No preguntes mas...

- Esta bien - Busqué rápidamente en mis bolsillos, pero no encontré ninguna moneda. La vida me odiaba.

Muchas gracias, pero creo que volveré en otra oportunidad, es que me acorde que tenía algo importante que hacer - retrocedí unos pasos y ocurrió lo más vergonzoso posible, mi estómago rugió. Dios que no lo haya escuchado, estaba a punto de echar a correr, pero...

¿No tienes dinero cierto?, no te preocupes podrás pagármelo otro día.

- ¿Enserio?

Si

Tomé aquel postre y lo probé. Jimin no solo era un chico hermoso y generoso, sino que tenía unas manos mágicas, era el postre más delicioso que probé en mi vida.

- Esta delicioso, eres asombroso

Noté que se ruborizo, pero aparto la mirada.

- Muchas gracias, prometo pagarte cuando vuelva, lo juro - dije antes de irme

Está bien, puedes irte - dijo Jimin con una sonrisa

No quería irme, pero era necesario sino se armaría un alboroto, aun más sabiendo, que en pocas horas era el baile real, eso significaba nada para mi.... porque el mejor regalo que pude recibir en mi cumpleaños, solo fue aquel que provino de sus pequeñas manos .....Tong Ake

HILOS DE AMOR_♡kookmin♡ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora