Un amor entre dos mafias.

capitulo 4- eres un imbécil

-¿Quién es tu padre?

-¿por qué quieres que te diga?

Me pongo a reír ¡este es el bebe con quien voy a convivir, un niño que se creó un dios (y lo es)

-de que te ríes

-¡que yo soy  tu niñera!

-¿mi niñera? De que hablas

-pues  soy tu niñera y tu padre es Derek

-tú no eres mi niñera, y quien te dijo que Derek es  mi padre

-solo lo sé, te irás con migo

-yo no me voy con tigo, tu apellido no me suena

-pues me vale si te suena o no, te irás con migo, ya se acabaron las clase de los dos

-apenas a pasado una

-no te pregunte, camina

-no me voy con tigo, hasta hablar con mi padre

-habla con tu papito, en la camioneta, o te da miedo irte con una mujer

-estás loca, vámonos pues- o ignore, camine así la camioneta y me subí, el se subió en el copiloto, comencé a conducir tenía dudas sobre todo esto

-¿conoces a tu padre?-le pregunte sin más, quería saber más de el

- claro que si, por que me lo dices

-por nada, sabes lo que es

-por supuesto, pequeña se que son algo que a la policía no les agrada, se que tu sos un arpía, y que me vas a matar o me llevaras con mi padre, seque mis padres, se separaron, pero siguen con sus vidas, hoy viviré con él, porque mi madre se fugo con alguien, pero no sé si me llevaras o no

-gracias por desconfiar de mí, no soy una arpía, tu no lo entiende, y te llevare donde papito, te dije que soy tu niñera

-¡que no necesito niñera!- me grito

-hey no me grites niño, yo te puedo hacer cosas que no te imaginas-le dije algo asaltada, pero el penso en otra manera ya que me miraba de pies a cabeza

-me imagino lo que me arias pequeña- me respondió con un poco de picardía, IMBECIL

-no te doy una paliza, porque te tengo que cuidarte bebe- solo lo mire de reojo y me dio risa su cara

-¡no soy un bebe! ¿Qué parte de eso no entiendes? Soy todo un hombre en todo los sentidos- es un imbécil de primera, a mí que me importa que sea hombre o  no

- pues no se nota que seas un hombre, te mira como un bebe- me dio tanta  risa que no resiste a reírme

-¿qué es tan gracioso? Me encanta tu risa- pero este chico es loco o que, primero me dice algo enojado y después ME GUSTA TU RISA es te es un bipolar

- tu sos el gracioso, ya deja hablar  me das dolor de cabeza, con esa vos de bebe- me risa no paraba, eso era buena Charlie

-eres la peor mujer que he conocido, sos tan tonta- me dijo tonta ese imbécil, okey

-pues no trabajo para que me caigas bien, sos tu que se tiene que portar bien con tus mayores, eres un bebe estúpido y nada mas

-yo no soy…- lo interrumpí

-¡CALLATE, NO TE QUIERO ESCUCHAS NO ENTIENDES, A SI ERES UN BEBE, QUE NO SABE ESCUCHAS!

-pe...-lo volví a interrumpir

-shiiiiiiiii

El se cayó no creí que lo iría a ser, pero lo hiso, en todo el camino solo me dedique a conducir, al final llegamos a la mansión, creo que no lo conocía, pero me dio igual, me baje del cuto y empecé a caminar

-hey que voy a ser aquí-me grita que yo estaba algo lejos de donde él se encontraba

-solo sígueme- lo mire y seguí caminando, sentía que él me miraba el trasero, me puse tan nerviosa, que no sabía cómo caminar, pero, lo disimule muy bien, casi no me preocupo por mi físico, pero no lo tenía tan mal

Llegamos a la oficina de Derek, todo sele quedaban viendo, pero yo solo les asentía para que lo dejaran, me imagino si lo hubiera dejado en el e estacionamiento lo hubieran… mejor no pensemos en lo que le harían

Toco dos veces y pase, estaba con su teléfono, pero cuando me vio colgó y sonrió

-¡hola hijo!- se abrazaron tan realmente, solo sentí una punzada en el pecho, solo recordaba a mi madre, y al bastando de mi padre

-¡hola padre!, como has estado, y quien es esta chica amargada-  ya me caía bien callado, este es un tonto, solo me aclare la garganta

-ella es Charlie petrov hijo, la que te enseñara unas cosas de defensa, y la que te cuidare estos días

-pero su apellido es….- lo corto su padre

-lo sé hijo, pero ella es de los nuestros, no me defraudaría, ella es de confianza, es como mi hija- eso era agradable que digiera que era con su hija, lo quería  tanto  era él quien me ayudo, todos esos años

Le debía mucho, solo sonreí

-bueno eso es todo, verdad-le dije a Derek, solo quería ir por un cigarro

-no, quiero que le indiques su habitaciones la que está a la par  tuya  y luego que recorra el lugar, jamás lo he traído aquí, así que no conoce- que buen padre era este, a su hijo no lo había traído a su casa, cada vez no podía creer que era padre

No le reproche solo quería Salí de esto, llegamos a la habitación y se la enseñe, era muy grande igual que la mía solo que esta era de color gris, y la mía de color azul, blanco y negro, tenía unas cuantas manchas de morado ya que era el color preferido de mi madre

-hey estaremos cerca pequeña, por si tienes miedo, podrá irme a abrazar o a ser cositas de grandes- este imbécil, y sus comentarios

-eres un imbécil lo sabes 

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