Humano En El Mundo De Mao Mao

Capitulo 9 (3/3)

Cerré los ojos pensando que moriría, atravesado por muchas espadas, pero después de unos segundos me di cuenta de que algo estaba mal. Cuando estaba a punto de abrir los ojos, escuché una voz suave y triste que me decía que mantuviera los ojos cerrados.

Desafortunadamente no escuché lo que dijo la mujer que me había enseñado todo lo que supe. Cuando abrí los ojos escuché una tos y recibí sangre en mi cara.

Aterrorizado, rápidamente abrí los ojos, pero la peor escena de mi vida estaba justo enfrente de mí. Mi Maestra, la persona que más respetaba, mi unica familia por todo menos la sangre, la única persona por la que cambiaría mi vida.

Se estaba muriendo allí mismo, no podía hacer nada. No recuerdo muy bien lo que dijo, pero todo lo que sé es que, sus últimas palabras, fueron como una bala que me atravesaba el corazón. Sabía que no estaba listo para dejarla ir, pero aún así me dejó después de unos segundos.

Sabía que iba a morir algún día, eso era la vida de un cazador, ella dijo, sabía que se iría algún día. lo que no sabía es que se iría así. Era mi Maestra, la persona mas fuerte que alguna ves e conocido, la apreciaba, quería que viviera ... quería vivir y pelear a su lado algún dia.

Recuerdo lo que dijo ahora. Así es, mi mente nunca quiso que lo recordara debido al dolor que me causaría y al odio que incitaria. Pero por qué ahora? después de todos estos años. ¿Es porque finalmente estoy contando esta, no, mi historia? Bueno, no es que importe ahora, ¿verdad?

¿Todavía quieres saber lo que dijo?

Bien, entonces, aquí está ... "No estés triste, no es que mi vida no fuera feliz, ¿verdad? Solo tengo un arrepentimiento. No pude mantener tu sonrisa intacta, pupilo. Sé que te dejo solo, en un mundo cruel y sin piedad, pero no llores, siempre estaré contigo. Así que ... se mas fuerte que yo, y sonríeme una última vez ... ¿de acuerdo? "

Despues de eso, supe por que mi Maestra había puesto tan to esfuerzo en que abandonara mi odio.

El dia de su muerte fue el mismo día que ...

... Me permeti sucumbir a el.

La sangre corrió en litros a traves de mi cuerpo, bañándome y vistiendome con la escencia vital de aquellos que habían jugado un papel importante en el asesinato de mi Maestra.

Mis manos cortaron a traves de carne y metal, carne de dioses, demonios y humanos, en uno oda al asesinato y el odio.

Permitiendome no sentir nada mas que odio, me sentí libre, como si de repente decenas de cadenas que me habían mantenido unido al suelo se hubieran roto, y ahora fuera verdaderamente libre.

Esta seguro en esos momentos, el odio era la clave para derrotar a quien me había quitado todo.

El odio me traeria venganza.

El odio me liberaria de sentirme triste de nuevo.

El odio me convertiría en lo que nesecitaba ser para derrotar a todos mis enemigos.