Destino del mundo al revés⚔️

Capítulo 1

Era el infierno. 

Todo Alrededor era caos y destrucción, gente gritando y gimiendo pidiendo misericordia al ser que las envío un infierno.

Y en medio de todo un niño caminaba entre los escombros. Decir que caminaba era un eufemismo. Arrastrándose entre todo las súplicas y llantos era todo lo que escuchaba y Aún así seguía adelante.     

'¿Por qué?' pensó el chico. No tenía recuerdos de lo que fue, no recordaba tener familia o amigos y si tenía probablemente ya se habrían carbonizado, tener que Dejar atrás a tantas personas no era algo que le gustara o pensará gustarle. 

Comenzando a desfallecer ya las fuerzas le habían abandonada solo su fuerza de seguir viviendo lo hacia seguir adelante, cayendo de espaldas alzo la mano pensando que algo o alguien podría venir a sacarlo de ese infierno.

Su suposición fue acertada. 

Kiritsugu Emiya no creía que todo se iría al carajo. 

Lo que pensó que sería una guerra por un objeto omnipotente que cumpliera su deseo termino siendo una pata de mono que causaría el final de la raza humana. Su esposa termino muriendo, convirtiéndose en el grial menor, su acompañante termino asesinada por un sirviente, lucho en una batalla a muerte con su peor enemigo en esta guerra y ordeno la ejecución de miles de personas con el noble fantasma de su sirviente al destruir el grial. 

Ciertamente su suerte era la peor. 

Ahora era una sombra de lo que fue en parte por la maldición del grial cortesía de Angra Mainyu. 

Esperaba salvar a alguien para expiar el pecado que cometió, solo una persona, solo una era suficiente para poder tirar lo que alguna vez fue el deseo de un héroe de la justicia.  Por su desesperación no logro visualizar a dos siluetas en el largo que observaban al hombre moribundo en sus intentos de salvar a alguien. 

Entonces Cuando ya no había nadie por salvar y tirar la toalla.

Una mano. 

Alzada a lo lejos esperando, decayendo poco a poco, Kiritsugu corrió tropezando con algunos que otro barro.

Ver a la persona que iba a salvar le hizo derramar lagrimas de alegría. Expiar este pecado empezaba por una persona.

"Estás vivo, gracias a dios estás vivo" era el que el niño oía a penas, la sonrisa que irradiaba del hombre lo puso celoso.

'Yo también quisiera sonreír' así pensó para sobre adentros en lo que le quedaba de conciencia.

Kiritsugu no era ingenuo, en el que observaba al chico no le quedaba mucho de vida, pelo rojo y ojos dorados sin vida era el que el caracteriza "No le queda mucho" razonó Kiritsugu. Si Iri estuviera aquí la magia curativa el mantendría vivo hasta el hospital más cercano.

No quedaba de otra.

La vaina de rey Arturo, Avalon, hacia presencia, disolviéndose en dirección al chico debería poder servir a la situación.

El queda ahora se revisarlo.

En el hospital de Fuyuki más cercano, el chico yacía recostado sobre una camilla de hospital Mientras Kiritsugu observaba con ansiedad.

Aunque Avalon debería haber curado sobre heridas físicas el chico aún no es despertaba.

El incendio no era normal.

Las llamas contenían maldición en menor grado, el chico al pasar por en medio de todo podría haber salir no solo con heridas físicas sino espirituales. Las maldiciones afectan tanto en un nivel físico como espiritual. Y ahí que agregar que eran de un dios del zoroastrismo no debía ser fácil sobrevivir.