Capítulo 6. El mensaje

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ALICE

Las lagrimas cayeron por mis mejillas casi sin darme cuenta. No le dije nada, no era capaz. Lloré toda la noche, no quería hablar con nadie, no podía. 

Me lavé la cara y me puse lo primero que vi. Ni siquiera desayuné.
Me fui directamente a la parada de bus. Pensé que la cosa no podía empeorar más, hasta que vi a Chase besándose con Olive en una esquina. No quería pensar en él, ya tenía bastante.  

Pasé las clases distraída, preguntándome si había sido culpa mía o simplemente se había cansado de mi sin motivo.

Chase me vio y corrió hacia mi.

- Alice ¿Qué te pasa?

- Déjame. ¿No te parece demasiado asqueroso estar con una diferente casa día? 

- Oye, que yo sepa tú y yo no tenemos ningún compromiso. - Desvíe la mirada. - No tienes derecho a enfardarte conmigo

-No, no lo tengo. Pero me parece repugnante que trates a las mujeres como un simple objeto de diversión para ti cuando te aburres. - Me marché de allí a paso rápido y me dirigí al baño. Demasiada carga. 

De pronto alguien tocó la puerta del baño.

- Cielo, ¿Estás bien? - Era Aly, por fin una buena noticia. 

Abrí la puerta y me tiré a sus brazos para llorar.

- Ya está, tranquila, estoy aquí. - Me abrazó durante un rato hasta que me relajé. - ¿Qué te ha pasado?

- Zack, ha roto conmigo— Dije sollozando

- Alice, lo siento mucho.

- Y yo. 

- No lo entiendo.  ¿Por qué alguien rompería contigo? Escúchame bien Alice eres genial, eres simpática y guapa. Si no ve eso, no te merece. 

En ese instante recibí un mensaje de Claire una de mis mejores amigas de New York. Era una foto de Zack besándose con Cristy otra de mis amigas. Se veía a lo lejos.
Volví a llorar y Aly me arrebató el móvil de las manos.

- No puede ser, detestable Alice, detestable. Pasa de él. 

- Seguro que ha roto conmigo para poder estar con ella. - No podía respirar.

En ese instante apareció la persona con la que menos quería estar en ese momento.

- ¿Qué pasa aquí? 

- ¿Y tú qué haces aquí? 

- ¿Por qué lloras? - Chase no le hacía ni caso a Aly.

- Vete. - Ni caso, seguía allí, mirándome. 

—Chase, te ha dicho que te vayas. No es una invitación - Cuando se fue, me sentí mejor, menos presión.  

- Cielo, ¿Qué ha pasado con Chase? 

- No es nada, simplemente me di cuenta del tipo de persona que es.

- Por fin lo ves. - Suspiró

- Me quiero ir a casa.

- Cariño no podemos queda todo el día.

- No podré soportarlo. - seguía llorando

- Tú puedes, estaré contigo. - Me abrazó. Me lavé la cara y salimos del baño - ¿Mejor?

- Si ... Gracias Aly. 

- De nada - Seguidamente nos fuimos a clase

Quería dar el tiempo atrás y volver a mi vida, la de siempre. 

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#1 SegundosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora