La lujuria del Duque [Lujuria-Gakupo]

Recuerdo 3

-¿Q-quien...?-

Definitivamente no era yo. ¿Por que estaba vestido con ropas purpuras? ¿Por que mi cabello era purpura? Las dudas recorrian en mi mente. Tal vez era un engaño del espejo. Me movi para observar mi reflejo y verifique que era yo.

Si ese era yo significaba que lo que "supuestamente" habia soñado habia sido verdad. ¿Ya soy rico? Debe ser sino no estaria aqui.

Me volvi a echar en la cama. Esta algo cansado. Cerre los ojos y me dormi un rato

[...]

Volvi a despertar. Pero esta vez no estaba solo. La hija de aquella señora estaba en la cama donde estaba durmiendo. Me sonroje

-Ehh...que haces aqui?-pregunte

-Estar contigo...¿no lo ves?-pregunto acercandose mas a mi

Esta chica es una mandada-penso Alexander

-Vete a tu cuarto...-susurre. Estaba muy incomodo ella se estaba acercando demasiado

-No quiero-murmuro y me beso

No sabia que hacer. Casi nunca me relacionaba con chicas y por lo tanto no tenia la menor idea de que hacer si me estaba besando. Asi que despues de una rapida reflexion, la empuje para que se aleje de mi.

-¿Que haces?-pregunte algo molesto

-Vamos...se que me deseas-dijo con una mirada pervertida

No negare que es una muchacha nuy bella. Tiene unos hermosos ojos miel que caen muy bien con su cabellos negros...ademas...ese escote...

-Mira no dudo que seas una mujer hermosa pero no estoy interesado en eso- le explique

-No te engañes-se acerca a mas- Me deseas y yo tambien te deseo-me susurro al oido mientras me mordia la oreja sensualmente (PV: Ay no)

¿Por que me siento asi?

Me sentia raro.

Ya basta.

Bien lo hare.

La agarre por la cintura para acerarla mas a mi y la bese. Ella no dudo tambien en hacerlo. Sus manos buscaban la manera de como despojarme de mi ropa.

[Al dia siguiente]

Iba comodamente en un carruaje que me llevaba a mi palacio. Sonrei. Recorde lo que habia pasado en la noche. Tener relaciones sexuales fon una mujer de la cual nisiquiera me acordaba su nombre. Me sentia satisfecho de alguna manera. No entendia porque ella se me habia mandado de esa manera. Ni que fuera prostituta. ¿Acaso esto era algo extra que me habia dado el demonio? No importaba. Lo habia disfrutado. Y queria mas. Mucho mas.

Por la ventana del carruaje mire pasar a muchas mujeres hermosas. Habia una en especial que llamo mi atencion.

Hize parar el carruaje. Le hize una seña para que se acercara.

-Ven esta noche-le dije y ella asintio sonrojada

Una vez mas sonrei. Esto es lo que queria.