Una ventaja que creo que poseo y me agrada pero a la vez destesto. Es el hecho de tener siempre presente que las cosas en algún momento finalizan y no hay mejor remedio que aceptarlo.
Esta mini story finalizara con lo siguiente:
El amor siempre será mental, con una conjugación química.
Ya me acostumbraré a verte cada domingo sin saber nada de ti, ni siquiera una pizca.
Sé que cuando te vea, mis ojos se deleitaran, pero ya no volveré a sentir la misma química.
A veces hago cosas que luego no sé sostener, aunque al menos me felicito porque lo intenté.
Seras de esos crushes, o semi-crushes y tantas cosas que te dije que se tienen en la memoria sin ningún remordimiento.
Pues así como me dijo una buena amiga:
"Me bastaba solo con que existiera para que fuese feliz. No tenía necesidad de llegar a ser algo con él para que me gustara"
Y estoy de acuerdo, solo que a esta historia le falta un cuento...
