[𝕊𝕒𝕘𝕒 𝔸𝕖𝕥é𝕣𝕟𝕦𝕞 II]
[TERMINADA]
Después de lo que ocurrió en '𝐄𝐧𝐭𝐫𝐞 𝐓𝐮𝐬 𝐄𝐬𝐩𝐢𝐧𝐚𝐬', Rose, continuo con su vida junto a Iris y su familia. Sin embargo, dejo atrás una secuencia de hechos, que generaran consecuencias catastrófi...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Pov por Rose
Dos semanas después...
Costumbre.
Esa es la palabra que describía mi matrimonio.
COSTUMBRE.
Así con letras mayúsculas, porque después de que Iris termino internada en el centro de rehabilitación y no en la cárcel, fue el momento en donde necesite encontrarme conmigo misma. Y esa fue una difícil tarea. Hasta ese día, no me di cuenta de lo dependiente que era de Iris. Yo era parte de esta insana relación. Parte de este círculo vicioso. Yo también tenía miedo a quedarme sola. Una de las dos tuvo que perder, y no se quien perdió más, pero perdimos. Sobre todo, nos perdimos a nosotras mismas.
Ahora, me encontraba en el proceso de florecer y emerger. De descubrir quién es Rose, después de tantos años encerrada en una relación sin propósito alguno. Después de que Louise se marchó con Iris al centro de rehabilitación, fui por los niños a casa d Rebecca y esa noche todo termino para ella también.
Nathalie, se marchó voluntariamente con Louise al centro, aun en contra de los deseos de Rebecca quien le juro que podían solucionar todo sin necesidad de que se marchara, pero Nathalie hace tiempo se marchó, solo que Rebecca no se dio cuenta hasta esa noche. Dudo que se diera cuenta por si sola en algún momento.
Mi separación, fue un gran escándalo a voces. Todos lo sabían, pero nadie se atrevía a preguntarme en la cara lo que ocurrió. Así que me toco quedarme con todas las historias que se inventaron en los pasillos de la oficina; Iris me encontró en la cama con Bárbara, eche a Iris de la casa para meter a Bárbara a la casa, el matrimonio de Marissa se canceló por mi culpa y Marissa no sabía cómo regresar los regalos... Nada de eso es cierto. Lo único cierto, es que soy una mujer libre o al menos el proceso de serlo, pero libre al fin.
—¿Algo más?
La pregunta de Ella McCullen me trajo de regreso. Inicie una nueva rutina, por algo debía empezar. Llevar a mis hijos al colegio, venir a la oficina y volver al mercado de la bolsa, al menos hasta la hora de la salida de mis hijos, ayudarlos con los deberes, ir a terapias con ellos, intentar que su vida fuera normal.