💫🌟LAZOS DE LUNA🌑🌗

CUARZO

10 de abril de 1941,Corea.

El tiempo es un factor extraño. Hace un año que recibí la última carta enviada por mi padre y la espera para tener otra entre mis manos a sido eterna para mí. En cambio han pasado dos años desde que Yoongi y Jungkook se presentaron como alfas en la jerarquía y desearía tanto retroceder el tiempo, que este fuera más lento para que mis amigos volvieran a ser aquellos niños alborotadores que jugaban conmigo todo el tiempo.

A pesar de que hace poco cumplieron los 17 años sus responsabilidades en el hanok se han incrementado, los juegos y desveladas que compartíamos han sido reemplazados por una que otra charla de vez en cuando. Me costo tiempo comprender que ahora ellos ya eran adultos ante los ojos de los demás, pero con el tiempo entendí que todos tenemos que crecer en algún momento y que la vida te trae experiencias nuevas junto a este; pero hay veces que me siento tan solo y anhelo tanto el pasado que compartíamos juntos. Yo también he crecido, ahora tengo 13 años pero eso no sirve de nada ya que ante los ojos de mis amigos aún sigo siendo un niño, aunque yo no me sienta por completo de esa manera; de hecho es muy confuso ya que hay días en los que me gusta jugar como cuando tenía seis años pero hay otros en los que lo único que deseo es acurrucarme junto a mis amigos y que ellos me cuenten sobre sus experiencias, así que trato de comportarme más maduramente para que lo hagan pero ellos solo niegan y se excusan diciéndome que no tengo la edad para entender ciertas cosas de lo que ellos hablan. Mi madre me ha dicho que estoy entrando en la etapa de la adolescencia, por lo cual esos cambios tan bruscos en mi persona y si bien es algo extraño para mi, también es algo que deseo fervientemente ya que de esa manera podré compartir más tiempo junto a Yoongi y Jungkook aunque eso implique dejar de lado los juegos que de vez en cuando aún disfruto.

Escucho como la puerta de mi dormitorio es abierta, haciendo que de la vuelta para encontrarme con los grandes ojos obscuros de Jungkook que me observan fijamente.-¡Jungkookie! ¿Qué haces acá? Pensé que estabas en los cultivos con Yoongi-. Jungkook me sonríe para después acercarse hacia mí envolviéndome en un cálido abrazó.-Hola pequeño, tienes razón estaba en los cultivos pero mi madre nos dio el resto del día libre así que Yoongi y yo pensamos que seria buena idea ir al lago‐. Me separo del abrazó de Jungkook para asentir hacia el algo triste, ya que se que no seré invitado por que ahora prefieren convivir con los otros trabajadores de el hanok.-Eso es bueno Jungkookie, ya les hace falta un descanso. Espero y se diviertan mucho junto a sus amigos-. Hago un movimiento rápido para salir de la habitación ya que las lagrimas se forman rápidamente en mis ojos y sinceramente no quiero que Jungkook me vea llorando; pero grande es mi sorpresa cuando este me cierra el paso colocándose en la puerta.-Hey, Tae... no creas que solo vine a tu habitación a contarte sobre nuestra escapada al lago. Vine porque quiero que te unas a nosotros, también van a ir Jimin y Hoseok créeme se lo que estas pensando pero ellos no tienen ningún problema en que nos acompañes. ¿Que dices? ¿Te unes a nosotros?-.
Mis pies se mueven rápidamente atraves de mi habitación en busca de mi morral y un cambio de ropa limpia, cuando por fin lo tengo sobre mi hombro tomó la mano de Jungkook para salir corriendo por la escaleras entre risas compartidas. Cuando hemos llegado a los cultivos no hay rastro de Yoongi ni de los demás, suelto un leve puchero al creer que Jungkook me a jugado una broma pero este parece igual de confundido que yo.-Al parecer se han adelantando, así que andando no queremos perdernos toda la diversión-.

Jungkook y yo nos adentramos en el bosque entre pequeñas charlas sin sentido y cómodos silencios. Transcurrido un tiempo llegamos hasta el claro donde en medio de este se encuentra el lago de aguas cristalinas que tanto nos gusta, sin perder tiempo y viendo que los demás ya se encuentran dentro, empiezo a quitar mi ropa ante la mirada atónita que me regala Jungkook.-¡Taehyung! ¿Qué carajos haces?-. La voz algo elevada de mi amigo hace que me detenga por un momento para observarlo, más no le pongo más atención a los leves gestos de molestia que el hace ya que deseo tanto zambullirme en el agua fresca y disfrutar como hace tiempo no lo hago.
¿Qué no es obvio Jungkookie? Me desnudo para poder darme un chapuzón.- Termino de quitarme la última prenda quedando solo en rompa íntima, para después echarme a correr rumbo al lago pero todo mi recorrido queda frustrado al Jungkook tomarme fuertemente por el brazo haciendo que me estrelle sobre su pecho en el proceso.-No vas a nadar así. Por favor vuelve a colocarte tu camisa íntima-. Frunzo el ceño ante la ridícula petición que mi amigo me demanda. En realidad no entiendo cual es el problema ya que en anteriores ocasiones he nadado justo como me encuentro ahora y Jungkook y Yoongi nunca tuvieron ningún problema.-No seas ridículo. Muchas veces he nadado de esta manera y nunca tuviste ningún problema. Aparte no soy una chica, todos los presentes somos hombres y tenemos lo mismo así que deja esa tontería de lado y vayamos a nadar; no pienso desaprovechar mi tiempo y tampoco tengo la intención de mojar la unica camisa íntima que tengo-. Jungkook se ve algo sorprendido por mis palabras más no cede en su posición al contrario ejerce un poco mas de fuerza sobre mí brazo impidiendo por completo mí segundo intento de escape.
-Se que todos somos hombres. Pero Hoseok es un alfa. No puedes andarte mostrando medio desnudo delante de uno siendo tu un omega.- Una carcajada escapa de mis labios ante lo tonto y ridículo que se comporta Jungkook, más este no se toma nada bien mi acción ya que su mandíbula se aprieta y sus ojos adquieren un leve color rojizo.-Pero que tontería dices, tú y Yoongi también son alfas. Aparte yo no soy un omega ni siquiera me he presentado y si ese fuera el caso Jimin también lo es y el esta nadando en ropa íntima sin ningún problema-.Jungkook intenta refutarle más aprovecho esa leve distracción en el para soltarme de su agarre y echarme a correr a el lago donde no espero ni un segundo para zambullirme dentro, el agua me golpea refrescando todo mi cuerpo sintiendo como el niño que llevo dentro despierta dándome el impulso para salir a la superficie y empezar a salpicar a Yoongi y a los otros chicos con el agua.
-¡Taehyung! Cachorro tonto, ¿Pero que carajos te pasa?.- La voz aguda de Jimin retumba dentro de mis oídos, haciendo que pare por completo mi juego quedándome estático en el mismo lugar con la mirada de todos sobre mí, un lamento amenaza con salir de mis labios más me contengo no queriendo darle el gusto a Jimin de verme llorando.
-Por dios Jimin.¿Porqué siempre tienes que ser tan pesado? Taehyung solo quiere divertirse como cualquier chico, así que déjalo ser .- Menciona Hoseok, un alfa de 17 años con un agradable aroma a hierbabuena quien trabaja en el hanok desde hace dos años al igual que Jimin.-El problema es que el quiere jugar con nosotros como si aún fuéramos unos cachorros como él.
En realidad no se por que lo siguen invitando cuando es más que obvio que es un inmaduro y no puede adaptarse a nosotros-.
La furia se hace presente en mi ante el comentario de Jimin, pero no me atrevo ha contestarle nada ya que se que él tiene la razón. Con la cabeza baja y sin volver a dirigirles una mirada me abro camino hacia la orilla para poder volver a el hanok ya que no deseo estar ni un minuto más en el lago, pero los brazos de alguien me envuelven por detrás en un abrazó haciendo que me remueva con violencia al no saber de quién se trata.-Calmado, mi pequeña luna.- La voz pacifica de Yoongi adormece mis sentidos, haciendo que me calme y me deje sostener en los brazos de mi amigo por completo.-Yoongi, déjame ir. No quiero arruinar tu tarde con tus amigos, trabajas mucho necesitas un descanso y no andar lidiando con un cachorro como yo.- Yoongi suspira mientras me da la vuelta quedando su rostro frente al mío, el cual se ilumina con una preciosa sonrisa la cual hace que mi corazón palpite desenfrenadamente.
-Tae. No hagas caso de lo que Jimin ha dicho, el solo tiene celos por lo importante que eres para nosotros y no soporta que robes nuestra atención.-
Tal vez Yoongi tenga razón, pero eso no hace que me sienta menos rechazado. Como mencionó Jimin antes, yo sigo siendo un cachorro y ellos ya no están para lidiar con uno.-Yo solo quiero divertirme junto a ustedes; pero creo que mis juegos de cachorro son bastante abrumadores para todos.- Yoongi niega, para después tomar ambas de mis piernas bajo el agua y posicionaras alrededor de su cintura arrastrándonos a pasos lentos de nuevo hacia los demás.-Tu ya no eres un cachorro. Y nosotros no somos unos viejos decrépitos para no disfrutar de uno que otro juego.
Sabes que te adoro y aunque yo he crecido no hay momento a tu lado que no disfrute; así que deja ese bello puchero de lado y sumerjámonos en busca de algún tesoro escondido en el lago.- Una extraña sensación se instala en la boca de mi estómago ante las palabras dichas por mi amigo, no se que es pero se siente cálido. El hecho de que Yoongi no me vea mas como un cachorro hace que todas las inseguridades que sentía se evaporaran por completo.
-Esta bien, pero prométeme que pasaras el resto del día junto a mí.- Yoongi niega con una pequeña sonrisita formada en sus labios, para después otorgarme un pequeño beso sobre mi frente.-Eres un manipulador, pero tampoco es que me pueda negar si me miras de esa manera con esos hermosos ojos que posees.- Un rubor se extiende por todo mi rostro, más no quiero que Yoongi lo note así que me sumerjo por completo dentro del lago empezando a nadar lentamente. No pasa mucho tiempo cuando decido abrir mis ojos dentro del agua observando como Yoongi ya se encuentra a mi lado buscando algún objeto o piedra preciosa en el fondo del lago. Así pasamos un largo tiempo hasta que el cansancio se hace presente en nuestros cuerpos obligándonos a dirigirnos a la orilla mas cercana, que se encuentra del otro lado de donde se hallan los demás.

Al salir lo primero que hago es dejarme caer sobre la arena húmeda seguido por Yoongi quién se sienta a mi lado estirando un poco sus brazos.-Al parecer nos hemos alejado bastante, descansemos un poco para después regresar a pie por la orilla del lago. ¿Te parece bien, mi pequeña luna?.- Asiento débilmente, observando como mi amigo busca algo dentro de sus pantalones cortos dejándose caer por completo en la arena cuando ya posee el objeto entre sus manos.-¿Encontraste algún tesoro en nuestra aventura?.- Dirijo mi vista hacia el lago por unos segundos conectando después esta con la de Yoongi, negando con cierta tristeza en mi rostro.-No,lo siento. Al parecer hoy no era mi día de suerte. ¿Pero que hay de ti? ¿Encontraste algo?.- Yoongi se voltea quedando frente a mi, copiando rápidamente yo mismo su postura mientras mi amigo envuelve mis manos con las suyas depositando un objeto pequeño dentro de ellas.
-Ábrelas-. Pronuncia Yoongi en un susurro.
Acato su orden abriendo mis manos lentamente revelando en ellas una pequeña piedra blanquecina con toques de color oro.-Es un cuarzo. Dicen que atraen la buena suerte o la fortuna; pero eso no fue lo que llamo mi atención al tomarla, si no los colores en ella. Blanco y dorado, como si la luna y las estrellas se funcionarán.- Una enorme sonrisa se posa en mi rostro a la par en que acarició y observo con detenimiento la hermosa piedra.
-Oh Yoongi es muy hermosa...parece que dentro de ella están nuestras almas viviendo completamente en armonía. ¿Me la puedes obsequiar?.- Yoongi me observa fijamente por unos segundos, haciendo que me ponga nervioso y agache mi cabeza; más una caricia sobre mi mentón regalada por él hace que vuelva a subir mi mirada conectándola de nueva cuenta con la de Yoongi.-No agaches tu mirada, si no como podre observar el brillo que transmiten tus preciosos ojos. Y sobre la piedra la tomé con un solo propósito; que mi alma gemela la conserve para toda la vida...
Así que prométeme que la cuidaras con mucho amor, mi pequeña luna-...