Profesor ;국기 [KookGi] ᴀᴅᴀᴘᴛᴀᴄɪᴏ́ɴ

Cuatro.

Le temblaba la mano izquierda, mientras que con su mano derecha apretaba sin piedad el lapicero de tinta roja, su favorito. Todas y cada una de las respuestas estaba correcta, ¡correctas! Jungkook se negaba a creer lo que veía, era simplemente imposible, mordió su labio con fuerza que hasta sintió el sabor hierrico de su propia sangre, su vena palpitaba en su frente, esa letra limpia y delicada contestando cada una de sus preguntas con facilidad, justo en la esquina superior y como una cuchilla a su orgullo brillaba el nombre Min YoonGi.

Había hecho trampa, si, era era la única explicación lógica, Jungkook pudo soltar su labio y suspirar aliviado. Min YoonGi había hecho trampa y eso era frustrante pero no más frustrante que pensar que alguien había sacado una nota perfecta en algunos de sus exámenes. Colocó el examen lejos de la pila de exámenes ya corregidos -y reprobados- apoyó los codos sobre la mesa, entrelazó sus manos, sus ojos aún observaban el examen con un poco de recelo, sonrió, por la expectativa de tener a Min acorralado frente a su escritorio, Jungkook sabía que no debía tener ningún tipo de atracción hacia su nuevo incautó estudiante, pero con el solo pensamiento de YoonGi sintiéndose intimidado por él, sus labios rojizos temblando, la forma en que nerviosamente acomodaba los lentes redondos cada cierto tiempo, si, se permitía fantasear con su alumno aterrado en su presencia que pronto sería una realidad.

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-¿Quieres dejar de mensajearte con NamJoon? ¿Qué el tipo no tiene clases que dar? -Preguntó irritado de ver a su mejor amigo pegado de su teléfono, JiMin río.

-Tranquilo Yoonie, algún día el profesor Jeon te follara contra su escritorio -Canturreó aún sin despegar la vista de su teléfono. YoonGi enrojeció.

-Aish, solo eres un mocoso. -Exclamó rodeándole los ojos, escaneo con la mirada al chico que le había dicho que huyera el primer día.

-Oh, ese es TaeHyung, ¡Hey TaeHyung! -Gritó JiMin contra todo pronóstico aturdiendo a YoonGi, ah, unos gritos que solo NamJoon podía amar.

El chico de rasgos casi finos se acercó a ellos y sonrió, la verdad es que éste era bastante atractivo, ya YoonGi lo había visto con cara de tragedia en las clases de Jeon, sin dudas este era uno de los más guapos de allí pero no era para nada su tipo.

-Oh, hola JiMin -Saludó con una sonrisa-. YoonGi.

YoonGi arqueó una ceja: -¿Me conoces?

-A nadie le pasa desapercibido el odio que tú y Jeon se tienen -Explicó éste y YoonGi le dió un codazo a JiMin que había reclamado si claro.

-El es TaeHyung, YoonGi, el responsable de distraer al estudiante de honor de la secundaria donde enseña NamJoon -TaeHyung enrojeció mientras que Jimin se carcajeó. YoonGi no pudo reprimir su risa.

-E-eso no es cierto -Se defendió el menor con vergüenza.

YoonGi dejó de escucharlos en cuanto el profesor Jeon pasó por la cafetería, su presencia era tan fuerte que todos a excepción de JiMin y TaeHyung giraron a verlo, sin embargo, la penetrante mirada del profesor mírenme todos, se posó solo en él, YoonGi tragó en seco incapaz de mantener aquella fuerte mirada, había algo distinto que lo hizo ponerse rígido como si Jeon estaba tan seguro que había ganado su pequeño juego que no le había dejado oportunidad de seguir su jugada.

-Ya comanse -Exclamó TaeHyung, YoonGi pudo despegar su mirada de Jeon para luego observar que todos habían seguido con sus charlas triviales y solo él y Jeon habían seguido con su juego de miradas.

-¿D-de qué hablas? -Preguntó YoonGi haciéndose el desentendido, como si ese pequeño intercambio de miradas que pareció durar una eternidad no lo hubiese calentado.

-Esa fue la tensión sexual más palpable que he sentido alguna vez -Explicó TaeHyung subiendo las cejas, JiMin río asintiendo.

-Es peor que cuando vas a darle tutorías de inglés a Hoseok -Taehyung golpeó la cabeza de JiMin sonrojándose de nuevo.

YoonGi frunció el ceño: -No había ninguna tensión sexual, yo odio a Jeon -Aseguró, podía que el jodido Jeon fuese el hombre más caliente que alguna vez haya visto, pero eso no quitaba el hecho de que lo odiase.

-Seguro -Exclamó TaeHyung con sarcasmo-. Yo odio a Jeon, ese idiota con complejos de grandeza hizo que repitiera un año -Admitió reacio-. En cambio tú quieres saltarle encima.

JiMin y TaeHyung rieron y YoonGi enrojecido se levantó y botó la mitad de su manzana, no se sentía hambriento, caminó hacia los primeros baños que encontró, se miró en el espejo, quitó sus lentes y lavó su cara con el agua helada, él no deseaba a Jeon, lo único que deseaba es que el tipo enloqueciera y perdiera su reinado del mal. Cerró los ojos masajeandolos levemente, la puerta se abrió y YoonGi se colocó los lentes de inmediato, sintió su rostro perder color al ver a Jeon frente a él, visualizo la puerta para huir, pero Jungkook se encontraba bloqueando está con su predominante cuerpo y no quería lucir patético ante éste, no otra vez.

-Profesor Jeon -Saludó con un ligero asentimiento tratando con todas sus fuerzas de que sus hormonas adolescentes no lo traicionaran y saltar de una vez al profesor, también lucho contra el sonrojo que estaba punto de atacar sus pálidas mejillas, ¿Por qué demonios Jeon lo miraba siempre de esa forma? Como si lo desnudara con una profunda y fija mirada.

-Ciertamente no esperaba encontrarlo aquí Min, en los baños exclusivos para los profesores -Instantáneamente sus mejillas enrojecieron, ya debía saber que ese baño era mucho más elegante y mucho más pequeño para estudiantes-. Pero me alegra de haberlo encontrado.

YoonGi arqueó una ceja y lo miró a través de sus gafas entrecerrando los ojos, cruzó los brazos sobre su pecho como defendiéndose-. ¿Y por qué será eso profesor Jeon?

Aunque su voz haya salido un poco temblorosa, se las arregló para lucir firme y tener una respuesta tenaz ante el profesor ''soy el idiota más grande del mundo''. Jungkook no se inmutó ante su altanería pero sí que sus perfectos labios se curvaron en una sonrisa que robó el aliento de YoonGi.

-No pensé que sería tan osado como para copiarse en uno de mis exámenes -Observó a Jeon caminando hacia él, en instinto YoonGi daba pasos hacia atrás alejándose, sin embargo, la ridícula acusación de Jeon había encendido su molestia, pero bueno, ¿Por quién demonios lo tomaba?

-Pues piense mejor profesor Jeon -Respondió ladeando una sonrisa, aún retrocediendo-. Lamento bajarlo de su estrella pero su examen era muy fácil, por lo menos lo estuvo para mí -Se defendió chocando con la pared, ahora estaba acorralado entre las baldosas blancas y Jungkook mirándolo con una oscuridad abrumadora-. L-le recuerdo que fue usted quién reviso nuestras pertenencias y se mantuvo vigilando cual perro guardián, así que no hubo ni la más mínimo posibilidad de que me pudiera haber copiado, pero le gustaría creer eso, ¿Verdad, Jeon?, es preferible antes que pensar que un simple niñato como yo pudo vencerlo en su mejor juego.

Un destello de luz paso por los ojos de Jeon, YoonGi apenas y se había dado cuenta de lo cerca que ambos estaban, pero le había retado, había dejado sin habla al profesor ''soy el rey '' pero se sentía como una batalla deseosa, Jeon no había respondido ni mucho menos YoonGi que se hallaba absorto en su mirada y el ligero roce de sus cuerpos, maldición, hacia demasiado calor.

-Vaya que tienes un boca suelta, ¿Eh? -Lo grave que salió la voz de Jungkook hizo temblar todo su cuerpo, entreabrió sus labios tratando de decir algo mordaz pero fue incapaz de esto al sentir como la mirada de Jeon bajaba hacia sus labios, diablos, YoonGi podía sentirlo, podía sentir su miembro ponerse duro con tan solo esa inocente cercanía.

Sus alientos mezclándose y sus ojos ya vidriosos deseando que Jungkook cediera y terminara con esa tortura y lo tomase justo allí, el mayor se acercaba con una mirada tan oscura y deseosa, YoonGi respiraba entrecortadamente en espera de lo que tanto ansiaba. Pero justo como la vuelta a la realidad que ambos necesitaban, alguien tocó la puerta.

-¿Jungkookie? ¿Ya saldrás? -La voz de quien parecía ser la profesora Jung interrumpió su cándido momento, Jeon se alejó de su cuerpo como repelente, YoonGi se quedo recostado de la pared de baldosa tratando de acallar su corazón latente.

-Lo veré en clase, Min.

Y YoonGi hubiese respondido más que un solo asentimiento si no hubiese estado tan ocupado mirando la semi erección en los pantalones del profesor Jeon.