-¿Enserio vas a volver a verlo? – cuestiono Danna
Ella no tomo la mejor noticia de que iba volver a verme con Alejandro, quería escucharlo una vez más, pero sé que en el fondo nada cambiara mi decisión de seguir soltera.
-Sí, una vez más...
Danna tomaba un vaso de agua y me mira con ganas de darme una buena hostia.
-Lo sé, se lo que estas pensando.
-Bien, entonces no tengo por qué decirlo a voz alta.
Me encontraba en un debate con mis sentimientos, me deje seducir por Itzan y ahora que a él le gusto, ya que se que podría estar profundamente enamorado de mi busco huir de el o hacerle volver a ser ese frio hombre y seductor que era el primer día que lo conocí.
-¿Hasta cuando piensas seguir así, cari? – pregunto muy preocupada
Se acerco a mí, jamás le vi así...
-Solamente hablare con él, nunca volveré a estar con alguien que me engaño.
-Estoy hablando de Itzan.
-Joder...
-Estas enamorada de él – susurra
-Itzan es tipo de hombres que solamente me trae problemas, es intenso, ya lo conociste.
-Si, está bastante tenso pero también es loco por ti.
-La locura no tiene nada que ver en esto, cada vez que se siente como si le ignoro o como si no le prestó atención se comporta como un loco, lo que creo es que su ego es dañado.
Danna bufa frustrada.
-Vale, sigue ignorando el hecho que estas enamorada de él, pero luego no lloras...
Se detiene por un momento y da vuelta para mirarme.
-¿Qué?
-¿No han follado en la cocina, verdad?
Quede callada...
-Joder, Ester... esto no te lo perdono en la vida, ya te dije que si vas a traer hombres acá que no follan donde comemos.
-No sabes cuánto lo siento, pero no es para tanto, no volverá pasar nunca más.
***
-Eso es todo para hoy, gente – dije a todos que estaban presentes
Ni siquiera mire a Ester, me dolía hacerlo.
Todos me saludaron y ya salieron de la oficina, le dije a Álvaro que íbamos a tomar unas copas de whiskey en el bar y me estaba esperando.
-¿Itzan?
Ester me llama, eso me presta atención, no es buena idea estar a solas con ella, nunca lo es.
-Lo siento, señorita Expósito, Álvaro me estará esperando.
Ella me mira incrédula.
-No tardara mucho, señor.
Ella bufa molesta.
-No vamos a jugar este juego, Itzan... vamos a hablar como dos personas adultas.
-¿Por qué no quieres cenar conmigo?
-Seré sincera contigo como siempre lo ha sido, tengo que asistir a una cena con Alejandro, necesita hablar conmigo.
-Bien, igual vuelvas con él, ¿no?
-Jamás volveré con él, es una cena y nada más.
Estaba molesto, ardiendo de celos, pero también estaba sufriendo.
-Espero que lo pases bien.
-Itzan, yo si quiero irme contigo cuando termino con este asunto pendiente, necesito que dejas estas escenas de celos.
Asentí con cabeza muy molesto, me acerque a ella, no quería dejarla ir.
-Por favor no te vayas, te necesito, reconozco que fui muy molesto estos últimos días pero no hemos hablado y te extrañe demasiado.
Me mira en los ojos y sonríe suavemente.
-Espérame y después nos vamos a tu casa, ¿vale?
Me besa en mejilla y sale de la oficina.
Después de pocos minutos oí alguien tocando las puertas y pensé que era ella, di vuelta sonriéndome...
-Ester, al fin has decidido...
Quede como puto mudo al ver que no era ella pero tampoco era Álvaro, era él, era ese hombre.
-Hola, hijo.
Desgraciado.
-Voy a llamar a seguridad.
-Espera un poquito, que no es la manera adecuada de hablarle a tu padre.
-Tú no eres mi padre, yo no soy tu hijo...
Se ve igual que hace tres años cuando vino a verme, ese día llame seguridad y lo echaron de aquí. Se ve como el peor pobre del mundo, destruido por completo pero aun calculador y frio.
-¿Ester es tu novia? ¿Tú esposa?
Apriete las manos, vuelvo a recordar todo lo que viví a su lado...
-Vete.
-Vale, dudo mucho que sea tu esposa, tu eres como yo, no serias capaz de tener una esposa a tu lado.
-¡Vete!
El mira toda la oficina y sonríe al volver dirigir su mirada hacia mí.
-No vas a poder echarme de tu vida tan fácilmente, soy tu padre, te crie y tu eres yo, eres igualito a mi pero no quieres reconocerlo.
-Si no te vayas te juro que llamare a seguridad y policía.
-Eso sería un escándalo, ¿no crees?
Estaba manipulando conmigo, hijo de gran puta...
-Necesito un poco de dinero, por eso vine.
-¿Para qué? ¿Para bebida? ¿Para pagar deudas?
-Te crees tan diferente a mí pero llenas tu oficina de licor, de seguro sigues bebiendo como antes.
Me acerque a él, agarrándolo por la camiseta.
-¿Vas a pegarme? ¿A tu padre?
Tenía una mano en el aire cerca de su cabeza, quería hacerlo, llevo queriendo hacerlo por mucho tiempo.
-No puedes... – dice riéndose - ... eres débil, por eso no puede pegarme.
Le empuje y trate controlarme.
-Tranquilo, me voy pero volveremos a vernos, nunca te olvides que lo mucho que tratas ignorarlo tú y yo somos iguales, hijo.
ESTÁS LEYENDO
Inevitable (Itzan y Ester)
FanfictionItzan Escamilla, frio y calculador, dueño de una empresa de moda, su vida cambia cuando conoce a Ester Exposito, una mujer que esta en busca de trabajo desesperadamente. A primera vista ella lo destesta pero cuando Itzan decide darle el trabajo empi...