Capitulo 14

225 17 1
                                    

Se suponía que estaba con Itzan y que habíamos iniciado una relación, pero cada día llegue a conocerle mejor. A pesar de estar conmigo el sigue siendo un mujeriego y coqueteo, todos dicen lo mismo cuando me hablan de él. También sale todas las noches como si fuera un soltero, bailando, bebiendo demás y a veces ni contesta a mis llamadas.

Danna me daba muchos consejos, diciéndome que debería mandarlo a la mierda o dejarlo, pero ahora es demasiado tarde, ya estoy adicta a él.

Cuando llegue al trabajo Ari estaba bien pegada a él, susurrándole algo en el oído, a Itzan no le importo comportarse así delante de toda la gente, lo que más duele es que no hico nada para hacerle entender que ya no sigue siendo soltero. ¿O acaso a Itzan le conviene estar conmigo para poder alimentar su puto apetito y luego coquetear con todas las demás?

Camine hacia los dos pero decidí ignorarlos, entrar en la oficina y cerrar las puertas, golpeándolas.

No pasaron ni diez segundos cuando Itzan entra y exige alguna explicación.

¿Es tonto o que le pasa?

-¿Sabes lo que pensaran todos si sigues comportándote como una chica caprichosa? – cuestiona

-¿Perdón?

No podía creer en lo que oigo, temo seguir con esta relación sabiendo que sabe cambiar de su comportamiento de un día  a otro.

-Ya todos se dieron cuenta que andas molesta últimamente... - dijo al cruzar los brazos

-¿Quién exactamente? ¿Tu amante?

El se ríe tontamente.

-Esto no tiene gracia, Itzan.

-Ari no es mi amante, no tengo amantes.

Di vuelta mirando atreves la ventana, no quiero ni verlo.

-¿Hay algo que te molesta?  - susurra en mi oído al acercarse

-Me molesta que andas coqueteando con todas como si tu y yo no estamos juntos, eso me molesta – dije sincera

-Yo soy así...

¿Es todo lo que tenía que decir?

Di vuelta mirándole muy confundida, hace tres noches no se comportaba como un idiota como lo está haciendo ahora.

-¿Qué pasa? ¿Vas a negar que sabias como soy antes de meterte conmigo? ¿Acaso alguna vez dije algo sobre coqueteos? ¿Es prohibido hablar con otras personas?

Se merece una cachetada pero no voy a hacerlo, no voy a bajarme a su puto nivel.

-Tienes toda la razón, no es prohibido.

Seguí camino hacia las puertas pero como de costumbre el me detuvo.

-¿A dónde vas?

-Coquetear.

-Ya, no tiene ninguna gracia.

-Tampoco era mi intención de pareces graciosa, si esta relación es bastante abierta entonces no eres mi dueño.

Salí de la oficina, sabía que logre hacerle daño con lo que hice, pero era la única manera de proteger mi corazón antes de que se rompa en mil pedazos.

***

Creí que Ester no estaba hablando enserio, pero cuando la vi hablando con otro trabajador me dio ataque de celos, pero no pienso correr detrás de ella. Mis ataques de rabia no tienen límite, soy el único que pueda controlarlos.

En vez de matarlo con mis propias manos y hablar con Ester, decidí bajar al gimnasio y entrenar boxeo un poco. Imagine la cara de ese imbécil pijo, lo seguí imaginando hasta que oí alguien entrar.

Cuando di vuelta vi a Ester, me mira con esa mirada que me juzga de inmediato.

-¿Qué? – dije

-¿Así que es acá que decidiste perderte?

-¿Pensaste que ya estaba en cama con otra? – me reí

-Tú puedes hacer todo lo que quieras, siempre.

-¿Y qué quieres hacer tu?

-Boxear – responde

-¿Boxear?

-Es la mejor manera de resolver toda la rabia que hay adentro, ¿no crees?

Ester se pone cómoda, tenía una sudadora, una camisa corta y yo no llevaba camiseta, quería quitar mis pantalones cortos también ya que estaba bastante atraído a su cuerpo.

-Me comporte como imbécil – dije al sentir sus golpes en mis manos

-Si – responde molesta

-¿Sigues molesta por eso?

Por sus movimientos y golpes veo que si sigue molesta, no sabía cómo ganar su perdón.

-¿Esto no te da la respuesta que necesitas?

-Pues sí, pero...

No pude defenderme, ella estaba llena de enojo y rabia, con mucha razón.

-No sé porque me comporto así, Ester. Mi intención no es joderlo todo, es parte de mi personalidad. Pero cuando tú estabas coqueteando con ese tipo fue parte de tu venganza y lo sabes.

Me mira muy molesta, creía que iba darme un golpeo en cabeza y dejarme hospitalizado.

-¿Te molesta? ¿No te gusta que estuviera hablando con otro?

-No me gusta ni que estés cerca de otros, te lo dejare muy claro si hasta ahora no te diste cuenta.

Ella me empuja par de veces, pero yo logre tomarla por los brazos.

-Haz lo que quieras hacer para pasar esta rabia, pero no me dejes nunca – dije desesperado

-Esto es demasiado para mí, lo que estoy sintiendo por ti va terminar hundiéndome por completo.

-¡No!

-Y tú lo sabes, por eso te comportas así.

-No, Ester... lo hice por no pensar, simplemente nunca supe como rechazar a una chica que esta coqueteando conmigo. Pero desde ahora hacia adelante voy a solucionarlo, ya no tienes que preocuparte por eso.

Ella no me creía, eso me hico ser tan desesperado por su amor.

Da vuelta, no quiere escucharme de nuevo, eso me mata.

-Te necesito – susurre en su oído

-Ese es el problema, Itzan... que tu siempre me necesitas y siempre piensas en ti mismo, no piensas en cómo me estaba sintiendo yo en todos estos días que estabas lejos de mi.

-No volver a pasar, te lo juro.

-Ya, claro, júramelo y mañana anda detrás de otra – me empuja

-No es así, te juro que te quiero a ti, lo que paso fue un puto error pero jamás te engañaría.

-¿Y que se supone que deberíamos hacer ahora?

Por fin da vuelta y me mira con esa mirada seductora.

-¿Qué quieres hacer, Ester?

Salta sobre mis brazos, besándome en labios, ambos éramos bastante caliente y llenos de sudor.

-Si te vuelvo ver coquetear con alguien voy a quemar todo el puto mundo  - dije al devolverle el beso

Había muchas cosas de las que teníamos que hablar y yo no tengo buena relación con comunicación y esas estupideces, lamentablemente pero creo que junto a Ester voy a aprender querer hacer cosas que nunca antes quise.

Inevitable  (Itzan y Ester)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora