★Capitulo 3★

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Giyuu:

Siempre me engañaba.

Pensaba que aquel al que me acercara saldría lastimado. Que yo no podía ser feliz, que había cometido miles de errores y que debía de ser reservado y no dedicarme a nadie.

Mi hermana, también Sabito.
Fui un maldito cobarde siempre.
Me negué a todos.

Hasta que llegó Kochou.
Ningún cazador se me había acercado tanto como ella. Nadie me mostraba una sonrisa por mas falsa que fuera. Nadie me cuidó ni me llevó la contraria tanto como ella.

Aún si ella era terriblemente molesta, la aceptaba y en veces era agradable.

¿Porque no me di cuenta?
¿Podría hacerla salvado si estuviera con ella?

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Tomioka se encontraba deprimido. Luego de que sus heridas sanaran, se incorporo nuevamente a trabajar.

Fue enviado a unas cuantas misiones con Tanjiro, Zenitsu e Inosuke, pero resultaron un fracaso para él. Estaba mentalmente debilitado y eso no lo dejaba pensar con claridad. Definitivamente de había convertido en un cobarde.

Los chicos tuvieron que terminar todo por si mismos ya que Giyuu se encontraba debilitado. Gracias a Buda, los demonios que enfrentaron no eran de gran capacidad.

Incluso, hubo que llamar a Urokodaki-san para que él animara a Giyuu.

Fue difícil para el. Pero debía y quería superarlo.

Quería vivir por ella, y por sus seres queridos a los que amó, y a los que seguian con vida. Quería dejar de ser un cobarde.

¿Pero por qué su dolor no cesaba?

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[3 meses después]

El primer mes se llevo a cabo una búsqueda con los hashiras en lugares cercanos a la batalla de Kochou y Douma. Lograron encontrar rastros de sangre pero nada mas. Luego de eso, fue como si no hubiera estado allí. Ningún rastro de su cuerpo o ropa. Eso daba mucho que pensar, pero a la vez, no podía servir de ayuda ya que nunca aparecía.

Tamayo-sama habia retomado algunos proyectos de Kochou Shinobu en la finca de las mariposas.

Giyuu se encontraba en rehabilitación debido a las heridas que le habían provocado pequeñas batallas con algunas lunas demoníacas. Iba al lago de las mariposas seguidamente, allí sentía una gran paz y entrenaba de vez en cuando

   Tanjiro, Zenitsu y Inosuke habian logrado subir un nivel mas como cazadores de demonios. Tanjiro se encontraba especialmente emocionado. Si se encontraba con algún otro compañero con rango mas bajo le aplicaba la vieja frase: La práctica hace al maestro.
Era un chico muy orgulloso de sí mismo tenía mucha voluntad para seguir aprendiendo.

   Iguro había pasado unas cuantas vergüenzas luego de ir a beber sake con Sanemi y Uzui, que lo habían pillado medio dormido hablando de Mitsuri. Al parecer, este, además de lidiar con Kanroji triste por la muerte de su gran amiga, y las misiones, debía aguantar las ocurrencias de Uzui.

  Una tarde del tercer mes, en el lago tan preciado que Tomioka había descubierto, se encontraba entrenando y meditando, como últimamente ya era rutina. Decidió acostarse en el lago y ver pasar las nubes, y de repente, un retaso de tela del haori de Shinobu se posó frente a sus ojos.

¿Que significaba eso?
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     Giyuu se sentía animado, y aliviado. Últimamente se encontraba mejor que antes.
   Incluso  aceptó la invitación de Tanjiro para ir a comer bolas de arroz hechas por nadie mas que Inosuke. Nadie mas queria comer de sus bolas de arroz porque tenian miedo de su sabor. Inosuke habia iniciado una competencia de cocina y Tanjiro decidió dejarse perder para no desperdiciar comida.

—VAMOS GOMPANCHIRO, COME COME COME, ACEPTA TU DERROTA Y COME!!—  Inosuke estaba, claramente emocionado. Nunca podia derrotar a Tanjiro y siempre buscaba una forma de enfrentarse a el.

Giyuu se limito a comer bolas de arroz, que de hecho no sabían nada mal.
—Sorprendente.- Murmuró.

Inosuke, orgulloso de si mismo, saltó encima de Giyuu-san y palmeó su hombro.

Tanjiro se volvió hacia el para mencionarle sobre los planes del siguiente día.

— Tomioka-san, mañana iremos al altar de Shinobu-san, te apetece ir con nosotros?—
Tanjiro le dedicó una sonrisa sincera.

—Y-yo...–Lo dudo por un momento– Esta bien, ire.— Apretó sus puños tan fuerte como pudo. Habia caido en la cruel realidad de nuevo. Tenía un secreto, y no sabía si debía compartirlo con Tanjiro. Ese pedazo de haori no había sido una coincidencia y él lo sabía, lo sentía.

Pero queria hacer el intento de por lo menos ser "feliz" por ella. Queria siempre recordar su sonrisa.

Pasaron el resto de la tarde comiendo bolas de arroz y hablando con Nezuko, que había aprendido a escribir algunas palabras gracias a Tanjiro. Zenitsu se había vuelto un poco loco y había hecho un desastre. Quería y necesitaba que Nezuko dijera su nombre. Pero en vez de eso, dijo el de Inosuke. Y gracias a eso se armó una pelea entre Inosuke y él.

Al final Aoi los jalo de sus cabellos y los hizo tomar una medicina asquerosa, ademas de dedicarles una sonrisa irónica, y llamarlos idiotas.

Tomioka llego a su hogar, y una extraña carta estaba en su puerta.

La extraña carta de contenía el nombre de alguien a quien conocía perfectamente.

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Cap 3 remodelado!!

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★Lago De Las Mariposas★ [GiyuuShino] [TERMINADA!!]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora