Margaret Miller.

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Capitulo 1: la fiesta

Desde mi azotea se puede apreciar perfectamente como el sol se esconde en el horizonte, mientras que la luna se apodera del cielo... aunque también se aprecia como Coraline Lawson, el amor de mi vida, se esta ahogando en besos que no son míos, sino de su estupida mascota Jacob Adams.
Verla con el siempre me pone de mal humor, en efecto lo odiaba. Pero a la vez me gustaba imaginarme en su lugar, me imaginé haciéndola feliz y recorriendo su cuello dejando un rastro de besos hasta sus labios... y luego-
Quise continuar en ese perfecto pensamiento pero la voz de Ophelia, mi otra mejor amiga, me baja de las nubes obligándome a ver la triste realidad.

- Quieres una servilleta Miller? -dijo Ophelia con su típico tono de burla y sarcasmo-

- No das gracia Benet -le replique con un poco de enojo-

- Si no disimulas un poco, se dará cuenta -comentó en una risa leve- Además, tengo una idea para despejarse un poco...

- Continúa...

- Las hermanas Cooper darán una fiesta esta noche, que dices?

Nancy y Donna Cooper, no puedo negar que sus fiestas son las mejores, pero siempre experimento malas experiencias, por ejemplo: cuando Cameron quiso sobrepasarse conmigo y lo golpee en la cara, o cuando caí en la piscina y el estúpido de Jacob me cargó solo para impresionar a Coraline, o cuando Nancy me vomito encima...
En fin, nunca terminaban bien.

- Sabes que? Vamos. -dije solo para complacer a mi amiga, que solo me mostro una sonrisa traviesa-

Luego de eso Ophelia fue a prepararse al igual que yo, poco despues llego luciendo un conjunto negro y ajustado de cuero, unas botas altas y un maquillaje rojo suave, a diferencia de mí, que vestía algo bastante cómodo pero a la vez lo suficientemente atractivo como para llamar un poco la atención, aunque me esforce bastante para parecer un poco mas precentable no tube suficiente tiempo como para mejorar mis ánimos...

- Lista? -pregunto Ophelia con emoción- por cierto, te ves super sexy!

- Vamos antes de que me arrepienta y, gracias, tu igual...

Llegando a la fiesta puedo sentir como Ophelia me toma de la mano, y me acerca mas a su cuerpo, ella sabía que yo estaba loca por Coraline, pero eso nunca le importo del todo, siempre había cierta tensión entre nosotras.

- Hueles eso? -cuestionó la rubia con los ojos mas verdes que de costumbre-

- Que exactamente? -pregunte con miedo de la respuesta-

- Huele a zorra por aqui -hablo casi en un grito-

Solo me reí un poco para luego ser arrastrada hacia la fiesta por la mano de mi amiga, al entrar me arrepentí mas de haber venido cuando en frente de mis ojos se encontraba el conocido rostro de Jacob, a pesar de que lo odiaba no podia negar que es jodidamente sexy... hasta entendí a Coraline por un momento ¿ella sabia que el estaba aqui? Digo, siempre salían juntos a todas partes.

- Margaret! - dijo el chico con la nariz roja y los ojos mareados casi en un grito, su cabello negro estaba revuelto y un poco... mojado? Esabamos a unos metros de distancia pero pude oler unos cuantos vasos de ponche con vodka saliendo de su boca, estaba ebrio y a Coraline no le gustaria eso... fue ahí donde se me ocurrió una brillante idea.
Sabia que me veía lo suficientemente sexy como para que aceptara seguirme hasta el piso de arriba, mire a mi amiga para darle a entender que no haga preguntas, caminé hacia mi presa y con una simple sonrisa basto para llevarlo conmigo.

Una vez arriba nos metimos a un cuarto, me recogí el cabello y empecé mi plan.

- Que piensas hacer, Miller?

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