Una Vez en la Vida.

4.

Después del incidente del viernes, Ben se quedó conmigo todo el tiempo y se rehusó a jugar en el partido. Fue la primera vez en mucho tiempo que disfrutaba tanto de una conversación con alguien ajeno a mis amigos y amé cada segundo.

Cuando terminó el partido, Jo y Clara regresaron a la enfermería con Joey y Javi detrás de ellos. El equipo de Joey ganó el partido.

Todos nos quedamos conversando un rato y antes de despedirnos para irnos a casa, Ben aprovechó para invitar a los demás a una discoteca nueva inspirada en los 70's que acaban de abrir hace unas semanas. Incluso invitó al primo de Javi para que conozca un poco más de gente.

Con suerte y está ve se comportará mejor que la última.

__________

-¿Este vestido se ve setentero?.-le pregunto a Clara mientras me examino en su enorme espejo.

-No sabía que teníamos que vestirnos de la época.

-No tenemos, pero investigué y al parecer les encantaba el estilo reto. ¿El morado es retro, verdad?-me acomodo la falda.

-Te ves retro y bonita.-Clara comienza a maquillarse en su gran tocador.

El cuarto de Clara es uno de los más elegantes y bonitos que he visto en mi vida. Las paredes tienen un patrón un tanto geométrico en colores blanco y rosa pastel, cortinas del mismo rosa cubriendo sus ventanas y otras grandes cortinas blancas, perfectamente estilizadas detrás de su gran cama, que pareciera fue hecha para una princesa. Todo su piso es de madera oscura, con una gran alfombra justo en el centro. Tiene un gran vestidor lleno de espejos de lado izquierdo e incontables obras de arte en todas partes, que estoy segura que todas las ha colocado su madre, sin mencionar el impresionante candelabro que cuelga justo del centro de la habitación.

-Entonces...-Clara comienza a decir.- Parece que Ben quiere caernos bien.

-Solo somos amigos.-por ahora.

-Un amigo que quiere besarte.

-No me molestaría si lo hace.-ambas nos reímos.

Clara se voltea a verme.

-¿Te gusta?

Me quedo pensando unos segundo.

-No lo sé.-me siento en la esquina de la cama. Ben es sumamente atractivo y hablar con él es increíble, pero no lo conozco lo suficiente.

Mientras Clara se sigue maquillando, saco unas pastillas anti-inflamatorias de mi bolsa sin que se dé cuenta. Fue imposible dormir el viernes por la noche gracias a mi tobillo y descubrí que los antiinflamatorios me calman el dolor por un rato, lo único que tengo que hacer es tomarlos cada ciertas horas. Me prometí a mí misma ir al doctor una vez esté segura de que no quedaré fuera del musical.

El timbre de la puerta suena y me apresuro a esconder las pastillas.

-¿Lista?-pregunta Clara.

-Lista.

Clara baja la vista y admira mis tenis por unos segundos.

-¿Qué pasó con tus plataformas setenteras?.-me mira fijamente.

-N-no... no tengo ganas de usarlas.-terrible excusa.