Si es que lo sabía,
al final lo sabía,
en lo profundo de mí lo sabía,
y cuando se lo dije también lo sabía.
Lo sabía pero nunca lo quise admitir.
A pesar de que sabía cómo te miraba,
a pesar de que no paraba de pensar en ti,
a pesar de todo lo que hablaba de ti,
nunca lo quise admitir.
Y lo sabía.
Y lo sabías.
Pero yo tenía miedo
por si te ibas.
Tenía miedo,
porque el futuro es incierto.
Joder, tenía miedo si
a qué me dejaras y a que te rieras.
Tenía mucho miedo a que fueras
como los demás,
aunque siempre supe que
no eras totalmente como los demás.
Joder, lo supe dos semanas después.
Dos putas semanas después de conocerte.
Pero no lo tomé en cuenta,
pues pensaba en otro.
Pregunté a más gente,
pero me dijeron que
era imposible yo contigo,
no por ti,
o porque fueras inalcanzable para mí.
Sino por mí,
porque no pegaba contigo.
Porque los estereotipos,
van muy por encima
y por ello
yo no pegaba contigo.
Yo me lo creí durante un tiempo,
hasta que nos empezamos a conocer...
Joder, que tonta fui,
¿por qué le hacía caso a la gente?
Aunque, en parte tengan razón pero joder...
Prefiero adivinarlo por mi cuenta.
Prefiero ver que,
al final la gente,
estaba equivocada.
Al igual que yo y,
actualmente sigo sin entender muy bien que me pasó,
qué tuvo que pasar en mi cabeza
para que quisiera darse cuenta...
Darse cuenta de que
eres una de las mejores personas
que ha pasado por mi vida.
Darse cuenta de que al final sí te quería y que,
con un poco de suerte,
tal vez,
tú también me quieras...
Pero aunque mi amor no sea correspondido,
no me importa,
me vale con tu amistad,
aunque mi corazón
siempre te latirá en
Te quieros
al son de tu voz...
Te quiero.
Kumi🤍
