Let You Down

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Al llegar nos bajamos de la moto y la encadeno. Me mira con la cabeza torcida y la sonrisa tímida de antes, decido ignorarle y subo los auriculares a todo volumen. Saco un papel del bolsillo de mi pantalón en el que pone el número del aula a la que tengo que ir.

El colegio es un edificio enorme y antiguo, con vidrieras de colores y altas torres de piedra. Un gran cartel azul y dorado con el nombre "South River High School" bordado con el color oro brillante. Me quito los cascos para preguntar por el aula y me sobresalta una voz suave y cuidadosa que me habla.

-Eres nueva aquí, ¿no?-  Me giro y veo que la voz que me habla es un muchacho de pelo liso color caramelo, vestido impecable con el uniforme escolar, y una mirada gélida y decidida que me mira atentamente.

-¿No había una pregunta más típica?

-Soy del consejo estudiantil, no creas que te lo he preguntado por gusto.- Me ruborizo pero trato de esconderlo.- Me han pedido que te lleve a la sala de evaluaciones.

-¿Sala de evaluaciones?- ¿De qué demonios estaba hablando?

-Acompañame. Por cierto, ¿tu nombre es...?

-Lena Oldbridge.- Le digo con un tono seco.

-Encantado señorita Oldbridge, yo soy Light Yagami.- Me esboza una sonrisa radiante e irónica. Es un cretino. - Sigame.- Me agarra de la mano y avanzamos a paso ligero por los pasillos mientras me explica mis horarios y cuál será mi taquilla. Entramos por una puerta en la que pone "Evaluaciones 101"

Al entrar, una señora de aspecto rígido y snob se acerca a mi. Es muy delgada, casi esquelética, con unos rasgos muy afilados. Lleva mucho maquillaje y un traje que le queda flojo color azul marino. Lleva el pelo rojo como el fuego recogido en un moño pequeño y le cae un fino tirabuzón por la frente. Lleva unas gafas finas que ocultan unos ojos color verde prado sin apenas expresión.

-Encantada señorita Oldbridge, soy la directora del centro, puedes llamarme señora Wheelbow.

-Encantada.- Digo con un hilo de voz.

-Vamos a hacerte unas preguntas, ¿de acuerdo?

-¿Qué tipo de preguntas?

-Unas simples preguntas para conocer a nuestros alumnos.

-Oh, de acuerdo.- Digo con aire de desconfianza.

-Toma asiento por favor.

Me siento en una butaca negra y vieja, con arañazos en los costados. La directora toma asiento frente a un escritorio de madera antiguo y coge unos cuantos papeles y un bolígrafo. Light espera con los brazos cruzados junto a la puerta y me mira con aire inquieto.

-Bien, señorita Oldbridge...

-Lena.

-Esta bien, Lena.- Alza la vista de los papeles y me sonríe.- ¿Cual es su propósito en este colegio?

-Conseguir graduarme, supongo.- Light suelta una carcajada y niega con la cabeza mirando al techo. Cretino.

Me muevo incómoda en la butaca y decido pensarme más las respuestas.

-¿Están vivos tus dos padres?

-Eh.. No, mi padre falleció en un accidente de coche hace 15 años.- Me pone triste pensar en mi padre, aunque no le conociese mucho ya que murió cuando yo tenía 2 años.

-¿Tienes algún trastorno psicológico o enfermedad intratable?- No entiendo a qué vienen estas preguntas.

-No. No que yo sepa.

-Bien, es todo. Puede que tengamos que hacerle unas preguntas más, pero ahora vaya a clase.

-Sí, gracias.- Me mira de reojo y le hace un gesto con la mano a Light que me abre la puerta con un acto burlón.

Al salir hay cinco chicos más sentados en unas sillas de madera. En el suelo sentado estaba Elle, el chico que había recogido con la moto. Se levanta con la postura extraña de antes y me sonríe de forma en la que solo un niño al que le acaban de regalar un juguete nuevo lo hace.

-¡Lena!- Antes de que Elle se acerque a saludarme Light me agarra de la cintura tirando fuerte de mi camiseta atrayendolo hacia él y haciendo que nuestros labios se juntasen. Sabía a manzana dulce.. un sabor que me resultaba muy familiar. ¿Pero de qué? Dejo mis ensoñaciones a un lado y me aparto dándole un empujón.

-¡¿Pero qué demonios haces?!

Hey, Lena!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora