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Relaciones poliamorosas

Hablemos de poliamor. Hay una enorme discriminación hacia las personas con este tipo de relaciones y desde ya les digo que no tiene nada de malo. Mi primera aclaración es que mientras sea una práctica con total consentimiento y sana, no puede ser incorrecta.

Fíjense en esto. La poligamia, que es común en ciertas culturas y religiones, consiste en un hombre en torno al que giran las relaciones que mantiene con varias esposas. Cinco minutos de leer sobre antiguas familias imperiales en China podrían dejarle en claro a cualquiera que esas concubinas que llegaban al punto de matarse entre ellas no estaban precisamente felices con su situación y el matrimonio. Eso no es poliamor, el consentimiento es necesario en el poliamor.

Una persona en una relación exclusiva que se ha ido a la cama con alguien más ha roto su acuerdo de exclusividad y eso tampoco es poliamor. Eso se llama ser infiel. La diferencia radica en que en el poliamor los involucrados saben de los demás y están de acuerdo.

Un amigo que tiene una relación poliamorosa de cuatro me decía que la mejor forma que encontró para explicarlo es: si las relaciones de dos fuesen parte de un videojuego, las relaciones poliamorosas serían el modo multijugador. Y esto es porque, aunque hay diferentes tipos de relaciones poliamorosas, cada una implica tanto respeto y confianza como (debería tener) una relación entre dos personas.

No, no son degenerados y no es un fetiche tampoco. Sí, hay quienes tienen fetiches de mantener relaciones sexuales con varias personas, pero ese es otro tema, las relaciones poliamorosas y esto son cosas diferentes.

Una de las formas que presentan las relaciones poliamorosas son tres, cuatro, cinco, seis...el número de personas que formen este acuerdo, en una relación romántica-sexual exclusiva, es decir, sólo están con las personas involucradas en la relación y tienen sentimientos por cada una, aunque por supuesto que sus interacciones pueden ser diferentes.

Existen relaciones poliamorosas abiertas, que quiere decir que las personas involucradas tienen una relación entre sí, pero pueden estar con alguien "de afuera". Generalmente se limita al ámbito sexual y los sentimientos se reservan para los miembros de su relación. No, no es malo, siempre que se tenga consentimiento de cada uno y sean conscientes de lo que implica este acuerdo.

Estas relaciones pueden tener otros tipos de acuerdos, para los que es necesaria la negociación. Incluso las relaciones entre dos necesitan acuerdos y límites. El cómo manejan su relación es asunto únicamente de las personas involucradas y tanto si tienes una relación poliamorosa, de dos, o ninguna, no tienes derecho a criticar la manera en que otros se relacionan, siempre que sea sano, responsable y consensuado.

Las relaciones poliamorosas pueden estar constituidas por personas de cualquier género. Algunas de estas relaciones sólo tienen mujeres, otras sólo hombres, otras son variadas e incluso hay relaciones sólo entre personas del espectro no binario. La orientación de las personas en una relación poliamorosa también puede ser diferente.

Otro de los principios en este tipo de relaciones es llamado "compersión". Este es el estado opuesto a los celos. Significa que si tienes una relación de tres, por ejemplo, te sentirás a gusto y feliz cuando veas a tus dos compañeros disfrutando de sus interacciones entre sí, aunque estas no te incluyan en ese preciso momento.

Antes de comenzar cualquier relación poliamorosa es necesaria la comunicación. Una relación de este tipo puede tener el mismo nivel de compromiso que una relación entre dos personas. No, no es una dinámica para todos, igual que no lo es las relaciones de dos. Está bien si no deseas una relación poliamorosa o sientes que no podrías estar en una. Y está bien querer una o estar dentro de una.

Reitero: las relaciones poliamorosas son tres o más personas que tienen dinámicas sanas (¡nada de maltrato de ningún tipo!), responsables (¡nada de menores de edad entre adultos!) y consensuadas (cada parte sabe y está de acuerdo). El cómo lo manejan, las interacciones y sus acuerdos son propios de cada relación, y no hay que juzgar a otros por eso.