Cuando te transfieren de un lugar a otro la felicidad no es el sentimiento que posees en ese momento exactamente.
Mas eso no pasó conmigo.
Dejé mi antigua Universidad para terminar mi carrera en otra ciudad debido a algunos percances. Alejarse de todo aquello produjo esa sensación de bienestar o alegría llamada euforia.
Jugaba con mis dedos con impaciencia en la sala de espera. A través de los grandes ventanales se podían ver algunos estudiantes luciendo impecables con sus uniformes. Pronto yo sería uno de ellos en esta Universidad.
Institución Parker, una de las más prestigiosas Universidades con las que contaba nuestro estado. Con un sistema convencional que no solo bastaba con el desempeño intelectual sino con el fortalecimiento de cualidades, sin lugar a dudas un auténtico paraíso escolar.
De aquel pasillo una mujer delgada con expresión seria pronunció mi nombre. Con entusiasmo agito mi mano dejando en claro que era yo a quien llamaban.
Por favor acompañeme y modere un poco su entusiasmo—la molestia era clara en su voz. Asentí en disculpas al tiempo que tomaba mis maletas para seguirla.— Es aquí, entre.
Al abrirse la puerta me adentré a la oficina del director, una habitación decorada por diversos premios, reconocimientos, y estantes repletos de libros me dieron la bienvenida.
Bienvenido seas, Jonathan Wood, es un placer para nosotros tenerlo aquí.— enunció el Director a primeras— Por favor siéntate frente a mí.
Muchas gracias señor director.—pronuncié en un agradable tono—
Unos meses atrás tuve la oportunidad de leer tu solicitud y datos. Quedé impresionado con tus logros escolares, es una suerte que hayas querido terminar tu carrera en este lugar.— dijo y yo sonreí agradecido por sus palabras.—
A continuación abrió una gaveta de su escritorio con un listado. Su rostro se contrajo al repasar el papel lo cual no dudé en preguntar si había algún inconveniente. Solo negó y lamentó no tener una habitación solo para mí por lo que tenía que compartir una con otro estudiante. A mis ojos eso no era un problema, realmente era una fácil oportunidad para crear amistad con alguien.
Tras salir de su oficina seguí las indicaciones que me llevarían al bloque C, lugar donde estaba mi dormitorio.
Puerta número doce, aquí es.— un suspiro salió de mi boca. Decidido a crear una buena impresión abrí la puerta encontrándome con un agradable olor a pino y una habitación sin ninguna otra persona a parte de mí.
El dormitorio contaba con una litera, un escritorio, dos pequeños muebles, una estantería un baño y algunas decoraciones. Nada fuera de lo común.
Instalé mis pertenencias en aquellos espacios que estaban vacíos.Tomé uno de los libros que habían en la estantería, Alas negras, así se llamaba, y me senté en unos de los sillones a leerlo.
♀️ ♂️
El sonido de la manija avisó que alguien abría la puerta. Cerré el libro y en un destello cepillé mi rojizo cabello con mis dedos.
Un chico de tez pálida y largo cabello oscuro entró a la habitación cargando unos libros dejándolos en el escritorio sin notar mi presencia. Con suma destreza me acerqué sin que mis pasos se escucharan tocando su hombro por detrás para tratar de asustarlo.
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¡Paul es una chica!
Romance¡Paul es una chica! nos cuenta la vida de Jonathan Wood, un chico el cual por alguna razón odia a las chicas. Es por ello que se traslada a Inst. Parker una Universidad únicamente de chicos para terminar sus estudios. Desde el inicio tuvo momentos...