Era Martes por la mañana, este seria un día más en la ciudad, donde humanos y monstruos convivían tranquilamente, claro esta, que no siempre todo estará bien.
Pes algunos problemas surgían de vez en cuando, pero eran solucionados al instante para evitar daños.
En alguna parte de la ciudad, más exactamente en un establecimiento, donde nuestro amigo esqueleto trabajaba de guardia nocturno, la hora marcaba 6:06 A.M, después de una tortuosa noche evitando a sus compañeras de trabajo.
Él se encontraba recargado en su silla, al frente del escritorio, con los ojos entrecerrados, con el único pensamiento que pasaba por su cráneo
Sans: ¿Pero que m***** pasó?
En su mente aún pasaban los recuerdos sobre la noche anterior, donde casi terminó siendo... seamos sinceros la palabra correcta seria "violado" por sus acompañantes de metal, más exacto por una coneja púrpura, que al parecer le agarró un extraño fetiche por nuestro amigo, pero gracias a sus habilidades sanstásticas logró salir virgen de esta situación, algo traumática en su opinión.
Soltando un gran suspiro, sacó de su chaqueta, un envase de color rojo, el cual dirigió a su boca y empezó a beberlo, así es, en toda la noche no pudo tomar su preciada kétchup, ni dormir como el lo había planeado...
Ahora lo único que quería hacer es irse a casa, meterse en su cuarto o en el congelador y no salir de ahí en todo el día, pero aún le faltaba arreglar y aclarar algunos asuntos con su jefa.
Al terminar de tomar su botella, se inclinó en el escritorio y apoyo su cabeza, quedando dormido...
Una hora después:
Se escucha un leve rechinar de las puertas principales que estaban siendo abiertas, un ligero mechón de cabelló castaño se asomó por la entrada, al instante una chica entró al lugar
La jefa del lugar observó el establecimiento con detenimiento, volteando a todos lados, hasta que se detuvo justo en el escenario de las "atracciones" principales, viéndolas con los ojos entrecerrados.
Dejó de lado su registro del lugar y avanzó por el lugar hasta llegar a la oficina del guardia nocturno, se quedó viendo la esquina del escritorio, donde había un pequeño charco de un líquido rojo, que goteaba al suelo, en el que se encontraban varios objetos tirados alrededor de la oficina, desde una manta azul, hasta un libro de chistes.
La chica solo observaba esto con una mirada algo triste, el chico que conoció estaba muerto... o eso pensaba
Natsuki: Creo que no lo logró-Dijo algo decaída
Pero detrás de ella una sombra se hizo presente, a la cual solo se le podía ver un ojo, el cual brillaba intensamente en tonos azules y amarillos
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Sans en FNIA: Un Trabajo Singular
FanfictionLa necesidad de un trabajo llevará a nuestro amigo, a conocer compañeras de trabajo no muy tranquilas, por lo que tendrá que sobrevivir y evitar ser ¿violado? Le deseamos la mejor de las suerte ¡Bienvenido a Fryda's Anime Convention! Señor Sans