amor rebelde

Parte sin título 41

El silencio se apoderó del coche, solo el llanto de Dulce y el ruido del viejo motor impidieron un silencio total;

Diego : Tranquilo, ya estamos chagando, diez minutos más ! - trató de sonreír

Dul : No me importa cuánto tiempo me importa que no quiero ir contigo, ¿no entiendes?

Diego : Creo que es mejor que te calles. - dijo que estrechando la mano contra el volante

Dul : ¡No, no me callo, porque no voy contigo! No quiero, no me puedes hacer. - ella estaba tratando de hablar tanto como fuera posible para que otro hipo no la interrumpa

Diego : Creo que es mejor que te calles. - repitió - No quiero que tengas más palabras hasta que lleguemos a la cabecera entendida?

Dul se quedó en silencio solo cuando las lágrimas corrieron por su rostro, así como las gotas de lluvia que ahora golpean y golpean las ventanas, causando un ruido tranquilizador.

Diego : Voy a tomar su silencio como un sí y por su bien, espero que sea correcto. - dijo detenerse en un semáforo en rojo.

mientras tanto:

Torre de perforación : ¿Puedo preguntar qué estás haciendo aquí? - dijo enojado - No te dejaré hablar con Christopher, entiende, él ama a Dulce y no a ti ! Le pido que por favor salir o tendré que llamar a la seguridad! Te ves como un... loco Belinda !

Eso es exactamente lo que parecía. Vio que le rasgaban los pantalones y que su camisa blanca de lino fino, ahora estaba sumbría, producto de la lluvia que cogerá hasta llegar al edificio de las empresas Uckermann's.

Pero no me importaba, lo sentía y todo lo que quería era la ayuda de alguien... alguien que pudiera ayudar. Christopher Uckermann, exactamente. Él la necesitaba para encontrar a Dulce salvada y ella lo necesitaba para... para redimirse.

Ya había hablado con Marta y Augustina para que no sacaran a los niños de su casa y no se fueran hasta que alguien se lo dijera. La seguridad también estaba en el mirador para que wouldn't deje que nadie dentro o fuera de la casa. Dios, ¿dónde estaba tu mente cuando aceptaste todo esto? Dejando a la pequeña y agraciada Bella estaría sola, sin madre, todo por un capricho tonto de no saber perder?!

Todavía se recuerda cuando la chica apareció con Marta en su cocina...

flashback:

Belinda : Augustina, ¿dónde está mi yogur? - Dije entrar en la cocina - Oh, lo siento ! - ver que el ama de llaves estaba hablando con otra señora

Agustín : No hay problemas ragazza ! - sonrió - Esta es Marta ... El que está cuidando de la niña de tu amiga, ¿recuerdas?

Belinda : Sí... - tartamudeado por atrapar la saliva - Usted no fue al parque o algo asism ?

Marta : Y vamos, que estamos esperando a que la pequeña Luana traiga un ositos de peluche.

Agustín : ¡Y ragazza Bella! - bromeó

Belinda : ¿Qué quieres decir traer a Bella? - frunció el ceño, pero pronto su pregunta fue respondida.

Al final de la sala una niña señaló. Una hermosa niña, que llevaba a otra niña. Belinda sonrió al ver a su hermana presionando para levantar el pequeño tamaño de las personas que se quejaban

Belinda : ¡Lu, la vas a dejar caer! - dijo acercarse para ayudarla

Luana : No pude encontrar a Ted, y a Bella no le gustó mucho Bet, porque tan pronto como la acerqué lo tiró en el perro – dijo desconsoladamente, pero Belinda sonrió al ver la alegría en los ojos de Luana – Mis brazos son adorados para que la llevara aquí ... ella es pesada! - dijo llegar al niño a Belinda