Once minutos- Paulo Cohelo/ ensayo

Conclusión

Llegamos a la parte en la que el autor justifica su locura.

Leí este libro hace dos años, muy contrariamente a lo que me permitía mi padre. Leía a escondidas por miedo al desprecio de su contenido. Amé sus palabras, amé a María, amé a Ralf, amé a Terence, amé a Coelho.

María es una mujer en la cual me siento identificada, nunca ve solo lo que tiene en frente, siempre quiere más, es curiosa al nivel de arriesgarse a perder la vida, la cordura o el bus.

Las oportunidades solo se dan una vez en la vida ¿no?

Hay que vivir

Estoy moralmente obligada a compartir porqué pienso que soy parecida a esta protagonista.

Porque quiere algo más de lo que tiene, porque tiene la fuerza suficiente para declararse independiente, porque no pierde la esperanza, porque quiere un cuento de hadas al final del día.

Antes de empezar este ensayo temía por mi nota porque no es un libro juvenil, mucho menos uno de niños. Anteriormente quería comentar este libro con alguien más pero ningún muchacho de mi edad lo conocía, y los adultos me decían que no debí haberlo leído. No entendía porqué

Es un libro profundo que demuestra la belleza caótica de una mujer y la sensualidad de su intelecto.

El propósito de Coelho es explorar el espíritu del sexo y el amor

¡Lo lograste!

Invito a todo aquel, aparte del profesor, que lea este ensayo, a leer esta preciosa obra y por sobre todo invito a dejar de lado la palabra <<prostituta>> que tanto impacto causa, y vean a esa mujer fuerte y decidida que se encuentra detrás de esa ropa provocativa y ese maquillaje insinuante.

Descubran igual de Ralf su alma

En conclusión con este trabajo nada es lo que parece y cada persona tiene una historia que contar.

En busca de mi propia Ginebra