PREPARACIÓN

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Al parecer la enfermedad avanzaba cada vez más rápido, ya no se encontraba en una sola zona de tu cuerpo ahora tenía una parte más. No debíamos decaer, debíamos tomar más fuerzas.

La familia se unió para poder luchar contigo, empezamos a recaudar recursos para ayudarte. Esa tarde hablé contigo, fuiste tan amable, y a la vez me dio tiempo de poder sentir tu miedo, tenías la mirada baja, y estabas en el lugar donde te encontré llorando varias veces. Cada vez que entraba ahí estabas sentado. Después de todo lo que sucedía, tu esperanza creció, te animaste a seguir trabajando, ahora tenias un pequeño negocio te gustaba ser libre, viajar, disfrutar un poco más este mundo. Ahí estabamos en aquel cuarto, mientras emocionado hablabas de los precios y que tanto querías vender, me miraste tan alegre, que mi corazón se detenía en aquellos momentos. Estabas haciendo lo que más amabas, nos demostrabas que ha pesar de la enfermedad, aún tenías ganas de vivir y disfrutar lo que hacías.

Nos hiciste disfrutar como nunca antes tu cumpleaños, y sobre todo aquel aniversario, cuando alegremente nos invitaste, esa misma noche decidí agradecerte, por todo lo que habías hecho por la familia y por ser una gran persona, por los valores con las cuales nos ayudaste a crecer, por todos los detalles que nos dabas.

Nos hiciste disfrutar el cumpleaños donde cantaste y dedicaste canciones a tus hijas y esposa, a disfrutar cada momento contigo.

Entonces es cuando comprendí que te estabas preparando para partir.

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