Cómo fue y cómo sigue siendo

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"¿A qué hora vamos a comer, papá?"

"Hum, buena pregunta, InSoo," el dedo índice de Kai se fue a su barbilla. Mantenía una posición pensativa como si realmente estuviera preguntándose lo que su niño le había cuestionado. El gemelo de este estaba solo a su lado, pero distinto a cómo se veía su hermano, interesado en el sillón por hablar con su padre que había quedado a cargo de distraerlos a ambos mientras KyungSoo hacía la comida por lo que le había pedido que no entraran por nada del mundo a la cocina al evitarse posibles incidentes—KyungSoo era un padre muy prevenido, Kai estaba tan orgulloso de eso, así que gustoso lo ayudaba—, KyungIn se hallaba más entretenido jugando con su pequeña tableta donde podía entretenerse coloreando simples imágenes. "Creo que comeremos como en... ¿cinco minutos?"

"¿Cinco minutos? Pero ¡es mucho! Y ya tengo hambreeee," su niño se quejó mientras sobaba su pancita sobre su playerita blanca con una I grande bordada—similar a la de KyungIn, pero con una K en su lugar; vamos, que tenía gemelos idénticos, JongIn necesitaba buscarse un modo de saber identificarlos mientras ambos crecían y se dejaban ver con más diferencias. Entonces, se rio por la exageración del niño, porque debía admitir que quizá eso lo había sacado de sí, pero de menos por lo mismo sabía cómo controlarlo.

"Cinco minutos no es mucho, InSoo, ya casi va a estar. Y mientras esperamos, ¿quieres que papá haga algo?"

"¿Hacer qué?"

"Mm, algo como... ¿una marometa mientras intentas dispararme?" Señaló en su típico juego donde sus niños simulaban pistolas con sus manos y él buscaba evadirles, pero al final siempre se dejaba 'tirar' por uno de sus disparos y caía muerto al suelo. KyungSoo le había dicho ya hacía tiempo que se veía ridículo haciendo eso y que no estaba seguro de que el que sus niños gritaran muere, muere, ¡sangre! a los tres años fuera lo más normal, porque seguro que pronto recibirían quejas del preescolar al que los iban a inscribir, pero... ¡qué más daba! Él era padre primerizo, su trabajo era la mafia y ese tipo de cosas era lo que más podía rodear su mundo. ¿Cómo no terminar por verse influenciado incluso cuando su pareja le dijera que necesitaban hablar de eso cuando los niños tuvieran mayor edad? Mejor que lo fueran desde ya asimilando, ¿no? ¿De una manera indirecta se podía llamar?

No obstante, eso no pareció emocionar a InSoo ahora, porque en su lugar, cuando él ya estaba levantándose del espacio que había tomado en el suelo sobre la alfombra blanca y peludita de la sala en su apartamento, su hijo, en cambio, lanzó un suspiro que de un niño de tres años quizá no se esperaba. Eso debió haberlo sacado o imitado de KyungSoo.

"Qué aburrido, no quiero jugar más eso, ¡quiero comer, papá!"

"Y yo también, pero la comida todavía no está lista. Papá KyungSoo necesita tomarse su tiempo para prepararnos muy ricas cosas, ¿sabes?" InSoo empezó a hacer una pataleta ante eso. Sus piernitas comenzaron a pegar con el cojín del que apenas sobresalían sus piecitos en donde se hallaba sentado. Él se paró recto ante eso, frente al televisor apagado y se mostró frente a su hijo con el comedor ya puesto a solo un pasillo de separación. Su cocina quedaba poquito más lejos, en la misma dirección, pero al estar ahí justamente se dio cuenta de ese modo que, por la puerta y ventanas corredizas que KyungSoo tenía cerradas del lugar, probablemente ni cinco minutos eran suficientes para que estuviera lista su comida de este día.

A veces su querido novio se tardaba un poco más de lo planeado. Kai se decía que seguro era porque estaba preparando todo con mucha minuciosidad, le gustaba cocinar, hacer menús variados y probar cosas nuevas, más para sus bebés que, en pleno crecimiento, necesitaban muchos nutrientes y darse la oportunidad a conocer nuevas cosas y comidas. Chen y SuHo, por su parte, le habían comentado que tal vez KyungSoo se tardaba tanto en la cocina porque era su único momento de paz en el día, y claro que se habían reído a su costa, pero a Kai esas cosas ya no le afectaban más. Él sabía lo que tenía en casa, y aunque muchos lo dudaran, el amor que había entre KyungSoo y él, como por sus hijos, era real, a un cien por ciento.

Little Shots [ChanBaek]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora