PRÓLOGO

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Julio del Año 561.

"¡Izumi, despierta!" los gritos de alguien llamándome desde la planta baja de la cabaña se esparcían por toda la habitación como si fueran parte del viento, no era de extrañar que se escucharan por toda la casa, aquella persona llamándome era Yui, la primera compañera que se incorporó a mi equipo de aventureros, ella es muy confiable y la verdad, si no fuera por ella, tal vez no me encontraría acostado en esta cama tranquilamente.

Yui es una chica tranquila, viste con una larga túnica blanca y una diadema verde en su cabeza, su cabello es color castaño claro, y sus ojos son verdes como las esmeraldas, bueno, ella fue la clave para vencer a Ofthermond, un poderoso no-muerto que casi me mataba, bueno, gracias a Yui no fue así.

Agarré mi ropa colgada en el closet y me la puse, era mi ropa normal de aventurero, y si me fijaba bien, era capaz de notar que se encontraba muy desgastada, verla así me dolía, pero sabía que en algún momento tenía que reemplazarla, ya que no me iba a servir más adelante.

Abrí la puerta de mi habitación y me dirigí al piso de abajo, donde estaban Yui y Chiko esperándome en la mesa, ya era hora de desayunar, fue lo que pensé. Ah cierto, Chiko era una ladrona la cual al principio la considerábamos ¿nuestra enemiga?, pero al descubrir que ella tenía buenas intenciones, terminamos volviéndonos amigos, e incluso, se incorporó a nuestro grupo de aventureros; sus ojos son rojos como el rubí, ella tiene el cabello negro con una colita amarrada con un listón rosado al lado superior derecho de su cabeza; su ropa era una chamarra con gorro color negra, un short rosa debajo de una falda negra, al parecer había cambiado un poco su look.

"Al fin despertaste tonto" bueno, sus insultos eran diferentes al inicio, podía decir que nos llevábamos bien, jajajaja.

"¿Qué hay de desayunar?" pregunté.

"Lo de siempre, ensalada de frutas" mientras más habitual se volvía la comida de aquí, más extrañaba la carne de Pueblo Musgo, ya llevábamos mucho tiempo en esta casa, por lo que era muy normal para nosotros comer ensalada de frutas, cosa que hacía que se volviera aburrido.

"Bueno, entonces" me acerqué a la mesa, donde estaba el único plato lleno de frutas cortadas sin dueño, y después me senté, para así comenzar a desayunar.

***

"Creo que con esto ya estamos".

Dijo Yui, habíamos almacenado todo lo importante para un nuevo viaje de retorno, era el día en el que por fin regresaríamos a Pueblo Musgo, porque necesitábamos prepararnos para la exploración del Templo del Crepúsculo, tendríamos que conseguirle una licencia de aventurera a Chiko y hacer algunas misiones básicas del ayuntamiento si queríamos ganar algo de dinero, que era en lo que más escaseábamos.

Todo lo habíamos almacenado en mochilas fáciles de cargar, algo de alimento para aguantar el tiempo de viaje, aunque afortunadamente ese tiempo lo íbamos a recorrer en un carruaje, por lo que no nos cansaríamos con facilidad y podremos llegar un tiempo antes.

"Bueno, creo que es momento de despedirnos de la cabaña" dije; los tres salimos de la pequeña cabaña donde nos habíamos alojado, la pequeña casa en la que habíamos estado viviendo durante las últimas semanas, para mí era un segundo hogar que se nos fue otorgado gracias a la amabilidad de la señora Chakal, ojalá ella pueda descansar en paz.

"Adiós cabaña" dijimos todos, dimos media vuelta, y comenzamos a caminar, el camino al pueblo de las colinas era corto, pero el camino que nos llevaría a Pueblo Musgo era largo.

Era probable que las veces que regresaríamos aquí iban a ser pocas, por lo que lo mejor era despedirnos por ahora.

***

The Tale of Orphelia Adventurers' World Vol 2: The Dark RoomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora