一 : Rutina

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Un nuevo día comienza mientras el cielo empieza a aclararse y los primeros rayos de sol se adentran en las ventanas de una mansión.

En una particular habitación con muebles y adornos de tonos claros entre beige y blanco, dormía plácidamente una chica de 13 años entre sábanas suaves de algodón y lino.

No era demasiado temprano en la mañana, pero Leigh ya se encontraba despierto. De hecho, él estaba en la habitación de Harumi, sentado en la banqueta de pie de cama mientras la miraba sonriendo.
Para él era inevitable no hacerlo puesto a que ella había crecido realmente rápido.
Aún recordaba a la niña tímida de 3 años a la que el cansancio le podía fácilmente y que no sabía nada de cómo hacer amigos. Verla ahora, diez años después, con tanta energía y con una sonrisa que derrochaba alegría era como presenciar un milagro de Dios en persona.

Se levantó de donde estaba sentado y se dirigió al ventanal principal de la habitación, el cual tenía un asiento debajo cubierto de almohadas y mantas, suponiendo así que ella se quedó dormida en él parte de la noche anterior.
Al abrir las ventanas hacia el exterior de la fachada, el aire gélido de la mañana entró de golpe en la habitación, agitando las cortinas blancas de la misma y mandándole un pequeño escalofrío a la chica dormida a ciertos metros de distancia.

Se acercó de nuevo a la cama y la arropó correctamente para evitar que el frío mañanero la despertase, a la par que dejó un beso en su frente.
Cuando se enderezó, la puerta de la habitación se abrió, y la robot humanoide entró con una chaqueta en la mano, para avisar al varón de que su limusina estaba esperándolo.

Él caminó hacia la salida de la sala y se detuvo justo en la puerta para mirar de nuevo a la chica. Sonrió y salió de la habitación, cerrando la puerta tras él.

"Zeta," llamó el señor de la casa después de cerrar la entrada. "¿Si, mi señor?" Contestó ello con una postura firme.
"Descansa," le ordenó fijando sus ojos en su estructura, y elle adoptó una postura un poco más relajada.

El hombre comenzó a caminar por el gran pasillo mientras alistaba correctamente su corbata. Zeta, lo seguía de cerca.

"Por favor, ¿podrías asegurarte de que Harumi se despierte a las 7:15 como mucho? Sé que estuvo despierta hasta tarde y quisiera que descansara un poco más." Hablaba el señor, la máquina esperó a que terminase de hablar.

"También deja preparado su baño y desayuno sobre las 7, para que pueda darle tiempo a todo, y si por lo que sea, os retrasáis demasiado y perdéis el bus escolar, llévala por propulsión. Sé que aunque le dijera que dejé la limusina para llevarla, aún así preferiría usar a Sora*." Rió despreocupado mientras terminaba de atarse la corbats. Le resultaba común escucharla hablar de lo divertido que era usar su skate. Zeta caminaba a su lado sujetando su chaqueta.

Caminó por el pasillo decorado con cuadros, estatuas y alguna que otra planta, colocándose su chaqueta con un sonrisa suave hasta que llegó a la entrada del hogar, donde su semblante cambió completamente al ver a un grupo de sirvientes cuchicheando cerca de la puerta principal.
Mientras bajaba las escaleras, una de las sirvientas le vio y enseguida avisó a las demás. Esto hizo que las demás se alarmaran y se alinearan para saludar a Lee.

Antes de llegar a la puerta, frenó en seco, justo enfrente de las sirvientas y volvió a mirar a Zeta.
"Ah, y dile a las demás sirvientas que comiencen otro protocolo para limpiar la casa. El que usan ahora no es suficientemente eficaz, y yo detesto ver polvo alrededor." Dijo enfatizando cierta palabra.

Beautiful Song (BNHA varios x OC) SPN ver. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora