Los ataques en la arena de combate ocurrían a gran velocidad, cada uno más rápido que el anterior. El dios solar, utilizando sus dos espadas doradas, cargaba a velocidades divinas contra su oponente, quien se bastaba de solo su arma derecha para bloquear y desviar todos sus ataques. La daga en su mano izquierda, por otro lado, tan solo parecía estorbarle pues no la usaba para otra cosa que no sea amagar bloqueos o desvíos. Shirou, pese a recibir las violentas caricias de las hojas egipcias, no detenía sus gráciles movimientos en aquella coreografía tan elaborada; su cuerpo hecho de cuchillas, de todos modos, cerraban aquellas heridas con una facilidad que hacía a cualquier desconocido pensar que había sido un gran mago en vida. Geir, la decimotercer valkiria pensaba justamente eso.
—Wooooow, Emiya-kun está peleando de tú a tú con Ra-sama... ¿acaso fue así de fuerte en todas sus vidas, Lord El Melloi? Debió ser un gran hechicero.
El Lord de la torre del reloj volteó su cabeza, distrayendo su atención del combate solo para centrarse en la niña.
—Primero que nada, es Lord El Melloi II. Segundo... por supuesto que no. De hecho, es seguramente el peor estudiante que he tenido en toda mi vida.
—¿Eh?, pero esas armas son tesoros heroicos, no puede ser tan fácil de invocar para un humano, y menos aún uno capaz de igualar físicamente a un dios —la aprendiz de valkiria no podía entender las palabras del gran profesor.
—En la práctica, sin duda es muy impresionante. Pero si vamos a los fundamentos de su estilo, es algo realmente sencillo; un mago de bajo rendimiento podría realizar los mismos hechizos que él. ¿No es así, Salomón-sama?
La pequeña niña volteó su cabeza para ver al rey mago, quien tenía su mirada fija en la tableta de participantes: ni siquiera se molestaron en preguntarle para saber que analizaba todas las infinitas posibilidades a través de su casi ilimitada omnisciencia. Y aún con eso, se tomó la molestia de explicar el punto de Waver.
—El refuerzo, pese a ser considerablemente útil, es una hechicería sencilla y muy básica incluso para el sistema taumatúrgico actual, que palidece al antiguo y que no puede llegar a compararse a la magia antigua. Dicha magia, es inferior a la magia de los dioses y aún más con la utilizada por el dios Ra. La proyección, aunque utilizada en antaño, se considera virtualmente inútil a menos que necesites un cuchillo para cortar tu cena, pues la degradación en sus componentes y baja durabilidad hace que sea realmente inútil en la práctica. La evocación espiritual, utilizada por todas las versiones de Emiya para fusionar sus mentes y compartir conocimientos, es algo que realizan casi involuntariamente por ser el mismo individuo.
—En pocas palabras Geir —Brunhilde se asomó al balcón, viendo aquel frenético combate—, Emiya-san es un lanzador de hechizos del más bajo nivel.
—Y aún así posee una hechicería de dioses alienígenas al nivel de la magia más pura de todas —Waver terminó la breve reseña del héroe justiciero.
Alaya, la encarnación del subconsciente colectivo, miraba más atenta que nadie aquel. El griterío de todos no la distrajo ni un instante de lo que realmente importaba.
—Emiya no es como cualquier otro individuo. Independientemente de si es amado u odiado, él siempre defenderá a la humanidad. Ese es su más puro anhelo, y el sueño que ha intentado perseguir desde la trágica noche donde asumió el papel de héroe justiciero. Es por eso que fue el primero en ofrecerse a defenderla... a defenderme.
Todos estaban impresionados por las palabras de Alaya, pero quien entendió más rápido que nadie los sentimientos de la diosa humana, fue...
—¿Quieres decir, que todas las acciones de Emiya-kun que protegen a la humanidad...? —comenzó a idear una teoría la curiosa Geir.
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Regord Of Ragnarok: The Legends Never Die
FanfictionUna combinación entre el universo de Fate y el de Shuumatsu, será una versión original con claros cambios respecto a las obras originales (especialmente con Record Of Ragnarok, del cual se tomará la premisa y algún que otro personaje; puede consider...