Save Me |Niall Horan|

Capítulo 2

Me sentía bien al hacer esto, aun que hace unos momentos había dicho que ya no haría esto, pero..., lo necesitaba.

Se abrió la puerta y Jane se exaltó un poco, volteó a ver quien era y era Jennifer. «Diablos» pensó.
-¿Qué estás haciendo?-le preguntó Jennifer un poco molesta, pues ya sospechaba lo que haría y Keila le había dicho todo.
-Nada, sólo venía al baño, ya sabes- le contestó Jane nerviosa y desvió la mirada.
-Sí claro- dijo irónica formando con sus labios una risa irónica- ahora dame la navaja- dijo y cambió su cara de ironía a una completamente seria.
-¿Qué?- le contestó Jane totalmente anonada pues no sabía que era tan obvio que haría eso.
-La navaja- le gritó- AHORA- enfatizó la palabra y Jane se la entregó-Gracias- dijo más tranquila- Por favor ya no lo hagas, no quiero que te pase nada y menos por cortarte, te juro que si te pasa algo a causa de esto te odiaré.
Jane se quedó callada y bajó la mirada; a Jennifer en verdad le importaba Jane, ella en verdad le preocupaba su amiga, y ahora aún más con eso que estaba haciendo. Tenía que ayudarla, tenía que distraerla de todos sus problemas; tenía una idea.

Comenzaron a caminar por los pasillos; ya era el receso.

-Oye Jane-dijo Lizz- ¿Tienes hoy la tarde libre?- le preguntó. Jennifer le había dicho todo sobre su plan y al parecer todos y todas estaban de acuerdo, o al menos eso pensaban.

-Eh sí, eso creo- dijo Jane dudosa, nunca la invitan a salir.

-¿Vas con nosotros al cine?- okay, esto se volvía raro, Lizz odia el cine. Pensó.

-Claro- dijo aún con duda.

Se sentaron en la mesa donde se encontraban los demás y se saludaron entre sí.

-Jane aceptó ir- dijo Lizz sonriente tomando un bocado de su comida y todos sonrieron y se miraron cómplices.

-Okay, esas miradas no me gustan, ¿qué se traen?- preguntó Jane frunciendo el ceño.

-Nada- dijeron todos al mismo tiempo. Aún más extraño.

-Claro- dijo Jane irónica y rodando los ojos.

-Confía en nosotros- dijo Niall tiernamente poniendo su mano encima de la de ella y mirándola fijamente.

-Esta bien....eso creo- le contestó dedicándole una sonrisa sincera.

A Niall le gustaba Jane desde hace más de 3 años, pero ella siempre lo vio sólo como un amigo, un mejor amigo, y eso le dolía aún más, siempre había estado tan cerca de ella, pero a la vez tan lejos; siempre había tenido que soportar a todos sus pretendientes y "aconsejarla" sobre que hacer cuando le gusta alguien o sobre su novio y eso no le agradaba, él la quería para él y sólo para él, ¿qué acaso no se daba cuenta? ¿qué tenía que hacer para que lo tomara en cuenta?. Le encantaba perderse en esos hermosos ojos marrones y él siempre estaría dispuesto en lo que fuese, pero, ¿y ella?, ella no lo sabía, no se lo imaginaba siquiera.

El timbre lo hizo volver a la realidad y se fue a su salón, tomó asiento y agachó su cabeza colocando sus brazos al rededor de ella. Estaba cansado, realmente cansado, pensar en ella dolía, no le hacía bien, sabía que tenía que olvidarla, pero no podía, le era totalmente imposible y el verla todos los días no le ayudaba mucho.

Sintió un leve golpe en la cabeza y levantó la cabeza, volteó a su derecha y ahí estaba Harry haciendole señas y apuntando el suelo; él volteó a ver el suelo y había un papel, lo recogió y lo extendió; el papel tenía un mensaje escrito. «¿Vas a ir al cine?». Niall escribió «Sí». Se lo volvió a lanzar a Harry. Realmente Niall no estaba seguro de ir, sabía cual era el plan y no le gustaba en lo absoluto, ¿Harry y Jane?, no gracias, no estaba listo para que le rompieran el corazón otra vez.

Llegó la hora de ir al cine y Niall ya había decidido no ir, aparte tenía cosas más importantes que hacer. Estaba viendo la tele cuando escuchó su celular vibrar. Era un mensaje. «¿Pasas por mi?». Oh no, era ella; ¿qué le iba a decir?, no podía rechazarla, no, a ella no, rayos, tenía que pasar por ella, no la iba a dejar plantada...oh si? no claro que no, eso no se hace y menos si intentas conquistarla. Se dio por vencido y se levantó, se cambió de ropa y fue a casa de Jane. Tocó la puerta y al instante ella abrió y él la miró embobado de los pies a la cabeza, si no fuera poque tiene autocontrol, juraría que ya la estaría besando, pero no era así.

-¿Y bien? ¿Cómo me veo?- dijo la muchacha mirándose y sonriendo insegura.

-Te vez más que hermosa mi princesa- ella sólo sonrió y lo abrazó.

A él le gustaba llamarla princesa, desde pequeños la llamaba así; realmente parecían novios, pero había un problema, ella no lo amaba.

-¿Nos vamos?- dijo Niall poniendo su brazo. Caminaron hasta el auto.

Llegaron al cine y ahí estaban los demás, al parecer eran los únicos que faltaban. Bajaron del auto; Zayn se les acercó.

-¿Por qué tan tarde y juntos?- dijo Zayn divertido.

-Cállate Malik- dijo Niall sonriendo.

-Ya sabes, cosa de mejores amigos- dijo Jane guiñándole el ojo a Niall para después reír. Los demás también se acercaron.

- Y ¿cuál veremos?- preguntó Lizz.

Realmente nadie había pensado en que película verían. Cuando por fin decidieron se sentaron en el orden planeado, primero Keila, Lizz, Harry, Jane, Niall, Liam, Jennifer y Zayn. Comenzó la película, todos estaban muy concentrados en ella, en una parte a Jane le dió miedo y sin pensar se lanzó a abrazar a Niall; Niall en ese momento sintió un ttipo "asdfghjklñ" ; Jane lentamente levantó la mirada.

-Lo siento- dijo ella y se apartó de Niall.

-No hay problema-dijo Niall sonriendo tiernamente.

Todos se volvieron a concentrar en la película. Harry miró de reojo la mano de Jane que estaba apoyada en el descansabrazos del asiento y fue subiendo su mano hasta quedar encima de la de Jane, ella volteó a verlo y se miraron fijamente; Harry a pesar de la tenue luz que provo aba la pantalla podía lograr ver que ella estaba sonrojada. Él quería abrazarla, así que levantó el descanzabrazos del asiento y se acercó a ella, ella aún no sabía como reaccionar. Harry la abrazó y ella se acurrucó en su pecho. Niall volteó a verlos, grave error, sabía que esto pasaría, volvió a sentir algo en su estómago como si se lo hubieran estrujado, sentía de nuevo ese vacío, de nuevo ese sentimiento de saber que la perdió una vez más.