Parte 1

558 19 0
                                    

¿Estaba seguro de lo iba a buscar? En realidad, no. Hasta por mi cabeza pasó la idea de que quizás sería el único idiota que buscaría información sobre eso. ¿Por qué no recurrir a, no sé, un sex-shop? Mi timidez a veces no ayudaba en la mayoría de las cosas.

Suspiré antes de ingresar al establecimiento, valla lugar, era toda una antigüedad, pero había copias de la biblia en hebreo antiguo hasta la mismísima obra "50 Sombras de Grey", sorprendente, pero era la mejor biblioteca que alguna vez había visitado.

Entré y sacudí un poco el paraguas en la puerta del edificio, para así evitar mojar el piso de madera, lo mojaría de todos modos pero no mucho.

Me acerqué a la recepción sin antes divisar una porta paraguas y poner el objeto en el lugar.

-Buenas tardes, señora Hills-

-Buenas tardes, querido, hace un largo tiempo que no te he vuelto a ver, te me has salido del mapa- dijo bromeando la señora Hills mientras ponía un separador al libro de Julio Verne para después continuar con la lectura.

-Es que he estado un poco ocupado con todo esto de empezar la universidad y no he tenido mucho tiempo para dedicarme a la lectura- me excusé.

-Entiendo, y... ¿Qué leerás hoy? Han llegado unos libros nuevos de Física y Energía nuclear que esperan ser hojeados por ti, Harry- una sonrisa cálida se formó en los labios a la bibliotecaria.

-No, hoy no leeré sobre física, he venido por unos libros, de ya sabes... eso- dije tratando de ser lo más obvio posible.

-Ahh... sobre sexo dices- la señora elevó la voz despertando la curiosidad de unas personas que leían en unas mesas de madera.

-Shhh... Por favor trate de hablar más bajo, usted sabe que estos temas me incomodan- seguro no había comparación entre mis mejillas y un tomate en esos momentos.

-Esta bien, la sección de Sexología y Erotismo está a diez estantes a la derecha del sector Religiones, si te quieres llevar un libro me lo pides, ¿Eh?- me guiñó un ojo

-Gracias- siempre decía lo mismo. Para ser una persona mayor era muy juguetona.

Me alivie un poco al saber que la sección de Sexología y Erotismo estaba más allá del sector de Religiones, o sea, en Religiones nunca había nadie, y la verdad me resultaría muy incómodo leer sobre eso mientras que otra persona esté mirándome.

No iba a leer sobre sexo porque tenía una obligación o algo, era solo porque había escuchado sobre unos libros eróticos y leerlos era la única forma de estar cerca del sexo, ya que era virgen y la verdad no te tenía a nadie con quien practicarlo.

Caminé un poco y pasé por la sección de Religiones, y fui contando los estantes a medida que caminaba, 9... y 10 . Ahí estaba un pequeño cartel en un estante que aclaraba "Sección de Sexología y Erotismo (Solo personas adultas)".

Me posicioné en frente de un gran estante y comenzé a repasar los títulos de los libros con la vista, puse algunos libros para luego llevármelos a mi casa y ...

-Hola- dijo una voz desconocida sorprendiéndome, ya que pensaba que estaba solo. Y como soy tan torpe tiré todos los libros al piso. -Uy, perdón, no quise asustarte- dijo la misma voz.

Me di vuelta y vi a un chico. Lo primero que me llamó la atención fue su belleza y sus ojos azules, eran profundos como si se trataran de un abismo azulado. Personalmente me quedaría toda la vida, si fuera posible, viendo sus ojos.

-Ho...hola- tartamudee. Todavía no me llego a perdonar ese acto de timidez.

-Mi nombre es Louis- elevó su mano en señal de saludo. Mis manos sudaban. Maldita timidez.

-Harry Styles- le alcanzé la mano y las estrechamos.

-Déjame ayudarte- se agachó y levantó todos los libros, luego me los dio y los presioné contra mi pecho para que no volvieran a caerse. -Veo que has venido a leer algo de erotismo, yo personalmente prefiero... -se acercó a mi oído- vivirlo en carne propia-

Mi piel se erizó.

Mis mejillas empezaban a calentarse.

-Pero recurro a la lectura para refrescar mis ideas, ya sabes para que... -dijo como si nada, retirándose un poco de mí, pero no demasiado. -Dime, ¿Qué buscas?... quizás podría ayudarte-

-No, gracias. Igual ya estaba por irme- Salir de la situaciones incómodas eran mi actividad principal.

-No creo que estés por irte, vi que recién has llegado- este chico me estaba poniendo nervioso y mi imaginación para elaborar respuestas cortantes se estaba terminando.

-Ehh... buscaba algo para leer...-

-Explícate-

-Bueno, es que quiero leer sobre ya sabes...- dije extendiendo las palabras.

-¿Sexo?- ¿Acaso yo era el único que tenía vergüenza de mencionar esa palabra?

-Ajam... si- respondí

-Yo soy experto en eso, yo te enseñaria lo que quisieras, cuando quieras- me guiño un ojo. Me estremecì. ¿Qué me estaba insinuando? -Tranquilo es solo un cumplido- dijo casi detectando mi inseguridad. Además, ¿Un cumplido? Sonaba más a un ofrecimiento de su parte.

-

†En la biblioteca† (OneShot) ~Larry Stylinson~ HotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora