A tu lado ( Naruto X Arturia)

Epílogo

Buenas, aquí el final después de no se cuanto tiempo xD. Disfruten 😉

Habían pasado ya varios años desde ese día tan especial para ella y aveces no podía creer que haya pasado tanto tiempo desde que apareció en este mundo con ayuda de Hagoromo.

Arturia suspiró un poco mientras sostenía su estómago inflamado, mirando hacia el Monte Hokage desde su hogar, con ropa ligera pero preparada para el frío, considerando que estaban a comienzos de Invierno. Había crecido de manera considerable en todos estos años y aunque no estaba a la par de su versión Lancer, seguía estando cerca.

-Kaa-San- gritaba una voz chillona, perteneciente a una niña rubia de ojos verde azulados, vistiendo un pijama rojo. La pequeña se acercó a la mujer para después tomarla del brazo con un puchero- Tou-San es malo, no me quiere dar dulces!!.

-Todavia es muy temprano para eso Mordred- le decía con una pequeña sonrisa Arturia a su hija, quien solo aumentó su puchero. La mujer le dio unas palmaditas en la cabeza.

-No soy un cachorro Kaa-San- se quejaba Mordred, aunque internamente se emocionó ante el gesto cariñoso de su madre, ya que ella a veces suele ser muy seria. Unos pasos se escucharon y un hombre rubio entró a la sala- TOU-SAN!!

-Jajaja- se reía junto a su hija un Naruto ya mayor, mientras la cargaba en sus brazos. Arturia solo suspiro mirándolos con una sonrisa.

-Tenia que sacar tu actitud ¿no?.

-No sé a que te refieres- le replicó haciéndose el inocente, aunque le fallo por la sonrisa torcida que compartía con su hija.

-Espero que este al menos si sea educado- decía la mujer frotando su estómago. El dúo padre e hija se acercaron a ella para después colocarse a su lado- Seria frustrante soportar a tres alborotadores como ustedes, con dos ya tengo suficiente.

-Eso es cruel Kaa-San- murmuró con lágrimas falsas, algo compartido con Naruto.

-Querida ya no soy tan malo como antes, ya sé comportarme.

-No te lo crees no tú.

-Je, tienes razón- concordó Naruto frotando su estómago, mientras Mordred se recortaba en las piernas de su madre.

-¿Que tal si vemos una película?- preguntó la niña a sus padres, quienes asintieron- entonces buscaré la película.

-Buscare las palomitas.

-Si traes Ramen no lo comerás durante un 1 día.

-Emm, tampoco hay que llegar asos extremos querida.

-Estas advertido querido.

La cámara se iba alejando del lugar hasta quedar en una ventana, donde un marco de fotos de hallaba, mostrando a Naruto vistiendo un kimono negro y a Arturia en kimono blanco sonriendo a la cámara, con Tsunade al lado de Arturia e Iruka al lado de Naruto.

También se veía a Arturia sosteniendo a un bebé con Naruto al lado de esta, ambos sonriendo con cariño al bebé que dormía tranquilamente.

Y mientras la familia se preparaba para una tarde entre ellos, viéndolos a la distancia se hallaba un cierto anciano fantasma que con una sonrisa se desvaneció de ahí, deseando una feliz vida a la familia del futuro Hokage de Konoha y del Rey de Camelot.

Fin.

Nueva historia en camino.