No sé tu nombre, puedo imaginarlo, pero me encantaría saberlo con certeza.
Sé que sentiste la conexión y la tensión en nuestras miradas.
Además, sé que te interesó mi presencia, tu permanente mirada sobre mí lo revela. Hablemos de tu mirada.. qué hermosa mirada tan dulce, intimidante y penetrante que parece que te cuida desde lejos y a la vez me pone tan nerviosa. Qué hermoso color de tez, tu piel luce tan suave y blanca, que anhelo poder acariciarla, poder besarla.
Produjo mucho en mí cuando ambos estuvimos cerca al irnos de aquel lugar me seguiste con la mirada y nuestras alturas tan perfectas para un abrazo ahí mismo.
No sé que tenés, pero qué hechizante tu mirar, tu tranquilidad en aquel asiento, tu estilo, tu energía.
Pasé todo el día pensando en vos y algo me dice que vos también. La vida nos volverá a encontrar y así podré conocer tu nombre con certeza. <3
«Bueno, esta redacción es algo que escribí con toda mi intensidad una noche mientras tomaba un rico café con la cálida luz de la lámpara de sal de mi cuarto mientras llovía.. espero que les guste mucho y recordemos que está muy romantizada y algo dramatizada, saludoos :3»
