alma sellada

CAP 1

Harry miró el cuerpo en rápida descomposición frente a él en estado de shock. Se acabó, finalmente todo acabó. El joven Auror sonrió con cansancio y se volvió hacia el resto del campo de batalla, tambaleándose levemente al hacerlo. Ese último hechizo debe haberle quitado más de lo que pensaba, a pesar de que estaba usando la varita de saúco. Su sonrisa se amplió cuando vio a los demás regocijarse cuando cayó el último Mortífago.

"¡Harry!" Se giró levemente y sonrió a la bruja que lo había llamado por su nombre antes de atraparla.
"Lo hiciste Harry, somos libres." Hermione le susurró al oído antes de besarlo. Él devolvió el beso con entusiasmo, balanceándose sobre sus pies por el cansancio. Hermione se apartó y frunció el ceño.
"¿Estás bien?"

"Solo cansada Mione, estaré bien." Sonrió, negándose a mostrar lo preocupado que estaba, definitivamente algo andaba mal. Hermione envolvió un brazo alrededor de su cintura y comenzaron a alejarse. Ella apretó su agarre mientras él se tambaleaba y luego gritó pidiendo ayuda cuando las piernas de Harry cedieron. Ella sostuvo su peso lo mejor que pudo, bajándolos a ambos al suelo empapado de sangre.

"¿Harry? ¿Qué pasa? ¿Qué pasa?" Preguntó Hermione incluso mientras comenzaba a ejecutar hechizos de diagnóstico sobre su prometido.

"Hermione." Harry susurró cansado. Estaba tan cansado que solo quería dormir.

"¡No Harry! No cierres los ojos amor. ¡Escúchame, mantente despierto!" Harry luchó por mantener los ojos abiertos mientras su mente registraba el pánico en su voz. Hermione nunca entró en pánico, era la persona más sensata que conocía. Pero se estaba volviendo cada vez más difícil hacer lo que ella pedía. Una parte de él quería ceder a la oscuridad que se acercaba, simplemente rendirse al silencio, pero otra parte estaba en pánico. Había cumplido con su deber y cumplido la estúpida profecía, entonces, ¿por qué estaba pasando esto? Él había dominado las tres Reliquias y había destruido a Riddle, entonces, ¿por qué estaba sucediendo esto? ¿Estaba destinado a no saber nunca lo que era vivir de verdad? ¡No! Tuvo que luchar; tenía que quedarse por Hermione, por sus amigos. No podía ceder por muy cansado que estuviera. Obligó a sus ojos a abrirse más y clavó su mirada en Hermione, su hermosa Mione. Él le sonrió y ella le devolvió la sonrisa a través de las lágrimas, su largo cabello castaño protegía su rostro de todos los demás. No apartó la mirada ni siquiera cuando sintió a los sanadores rodeándolos. Se las arregló para levantar su brazo, alcanzando su rostro pero no pudo alcanzarlo. Al ver su intención, tomó su mano y se la llevó a la cara.

"Tan hermosa, mi Hermione." Susurró, los párpados revoloteando con cansancio.

"Espera Harry, por favor espera." Ella le suplicó, agarrando su mano desesperadamente. Él le devolvió el apretón débilmente. A pesar de sus deseos, podía sentir que la fuerza se le escapaba constantemente de su cuerpo. Él le sonrió de nuevo incluso cuando notó que los demás caían de rodillas cerca, aunque fuera del camino de los Sanadores.

"¿Qué está pasando? Él ganó, ¿no?" Harry se las arregló para mirar a Ron mientras su compañero hablaba. Los Sanadores intercambiaron miradas y Harry suspiró, lo sabía sin que ellos tuvieran que decir nada.

"Me estoy muriendo." Él susurró.

"¡No! Relájate amigo, te sacaremos de aquí y lo arreglaremos, ya verás." Ron discutió. Harry logró una risa suave pero cansada.

"Cuida de todos por mi hermano." Podía decir que su voz se estaba desvaneciendo, pero de nuevo su vista también se estaba apagando, así que realmente no importaba. Ya no podía ver a Ron. Todo lo que podía ver era el rostro manchado de lágrimas de Hermione.
"Te quiero." Él respiró y ella sonrió con tristeza.